La escritora naveta Marta Portal falleció hace un año, exactamente el 26 de agosto de 2016, pero su villa natal se resigna a olvidarla. Después de haber dedicado varias jornadas a su figura con motivo del Día del Libro el pasado mes de abril, el concejo se prepara para seguir manteniendo vivo su legado. Por lo pronto, está previsto colocar una placa conmemorativa en su casa natal para dejar constancia de su origen naveto.
Lo cierto es que la relación de la escritora con Nava fue de un afecto recíproco, ya que el municipio la honró en varias ocasiones y ella devolvió el cariño de su pueblo con numerosas pruebas.
En 1991 regresaría a la villa para ser pregonera del Festival de la Sidra; en 1994 el municipio la nombraría hija predilecta; y en 2001 asistió a la inauguración de la nueva Casa de Cultura de Nava, que desde entonces lleva su nombre.
La autora donaría parte de su biblioteca, con más de 3.000 volúmenes, al municipio, que en la Casa de Cultura tiene una sala en la que se atesora ese legado, el fondo documental Marta Portal.
Pero, como adelantó la concejala Desiree Carrio, está todavía pendiente una nueva donación de su biblioteca personal que dejó en poder de su familia y que se incorporará próximamente al fondo de la escritora, una vez que se catalogue.
Asimismo, el Ayuntamiento de Nava convoca un Premio de Novela Corta de Terror e Historias Fantásticas, también con el nombre de Marta Portal. Lleva tres ediciones, y la de este año, que ha ganado el gijonés Rafael Novoa Blanco con la novela "Alice", se presentará en octubre en fecha aún por determinar.
Nava quiere seguir honrando la figura de Marta Portal porque el municipio fue el territorio de su infancia, algo que ella parece que nunca olvidó. Allí nació el 10 de agosto de 1930, pero dejaría la villa a edad temprana. Hizo el bachillerato en Gijón y posteriormente se fue a vivir a Madrid.
La escritora irrumpió súbitamente en el mundo literario en el año 1966, cuando ganó el premio "Planeta" con la obra "A tientas y a ciegas". Entonces era una escritora completamente desconocida para la gran mayoría.
Marta Portal viajó becada a Colombia para hacer un estudio histórico-filológico con una beca de la Fundación Juan March que fue determinante para sus futuras querencias literarias, ya que desde entonces comenzó a estudiar a fondo la literatura hispanoamericana y a dedicar numerosos ensayos a sus autores.
De hecho, su tesis doctoral en Ciencias de la Información la dedicó al escritor mexicano Juan Rulfo. La autora profundizó en la obra de este y otros muchos autores hispanoamericanos.
Escribió novela, ensayo y también fue columnista de numerosos diarios y revistas literarias. Además, entrevistó a muchos autores tanto españoles e hispanoamericanos como de otros países. Y en muchas de sus obras aparecen los recuerdos de su infancia en Nava, una villa con la que mantendría un estrecho vínculo casi hasta sus últimos días.
