Incitar a la gente a plantar más árboles autóctonos en sus fincas y a cuidar el medio ambiente. Ese es el objetivo de Berto Ordieres, vecino de Argüeru (Villaviciosa) que dona de forma altruista cuarenta robles listos para trasplantar a quienes se comprometan a darles los cuidados esenciales para salir adelante.
Ordieres explica que, por ser su primer año con este tipo de árboles y por no invertir demasiado dinero, quizás no hizo "del todo bien" las macetas de tierra. Consciente de que lo mejor para los robles es que se planten cuanto antes, busca nuevos dueños para los mismos. "Quiero que piensen bien el sitio donde lo van a plantar para que duren al menos cien o doscientos años", apunta el villaviciosino.
Su iniciativa repobladora ha recibido muy buena acogida en las redes sociales, donde ha sido compartida por varios usuarios. Sus seguidores animaban a adoptar un árbol bajo la premisa de que en la vida hay que tener un hijo, escribir un libro y plantar un árbol. "Pues ahora ya no hay excusa para cumplir con al menos uno de estos preceptos", apuntaban los internautas.
En el concejo de Villaviciosa los árboles que más extensión ocupan son los eucalitptos, para frustración de los ecologistas, que llevan años denunciando que estos ejemplares no autóctonos empobrecen el suelo.
