El lleno está asegurado un año más en Candás. El verano volverá a registrar una gran afluencia de visitantes en la villa, a la que no afectan las crisis. Cuando sale el sol, Candás se convierte en destino preferido de muchos asturianos, como se vio ayer con la presencia de muchos ovetenses que optaron por la villa para disfrutar del Martes de Campo.
La ocupación está garantizada de año en año porque la clientela es fija. Por las calles de Candás se puede ver algún cartel de venta de pisos, pero poco de alquiler. Las agencias inmobiliarias de la villa se centran más en la venta porque "el mercado del alquiler es menor", coinciden en señalar en todas las inmobiliarias. Y aunque no se vea obra nueva, tan sólo alguna promoción aislada, es la venta lo que más se trabaja en este momento.
El perfil del veraneante en Candás se define por la oferta de alquiler. O por su falta. "Ahora se tiende a alquilar los pisos durante todo el año", explica Patricia Martínez, de la agencia MB. El origen mayoritario de quienes eligen Candás como destino en verano está en "Oviedo y las cuencas mineras, así que con el alquiler anual tienen la opción de disfrutar aquí de los fines de semana", afirma. "Con los precios que se pagaban hace unos años, resultaba más rentable el alquiler anual".
También por parte de los propietarios de los pisos resulta más cómoda la renta para todo el año. "Se ahorran muchos problemas y riesgos. No tienen que hacer una limpieza cada vez que entra un inquilino, no tienen que asumir los gastos generales durante el tiempo que el piso está vacío, como el agua y la luz, y saben quién está en su casa, sin riesgos".
Las agencias en la villa explican que no se dedican al alquiler de verano, tan sólo Patricia Martínez lo hace en su agencia, pero "como un complemento de la oferta, es algo casi residual". Y lo mantiene "por no dejar colgados a clientes que llevan con nosotros desde hace 20 años". Aunque cada vez es más difícil conseguir un alquiler para el verano en Candás, pues hay más demanada que oferta. "Lo que hay, está ya cerrado desde enero o febrero", cuenta Patricia Martínez, "incluso hay quien ya lo reserva de un año para otro para asegurar las vacaciones".
El precio medio del alquiler varía por meses. En julio y agosto, un piso para seis ocupantes cuesta entre 1.200 y 1.400 euros por mes. En junio y septiembre, los mismos pisos bajan hasta 900 euros. "Son precios de hace veinte años", señalan en MB, donde llevan más de dos décadas trabajando en Candás. "Hubo un alza en el inicio de los años 2000, pero con la crisis los precios bajaron a los niveles de 1997, la única diferencia es que antes se pagaba en pesetas y ahora en euros, pero las cantidades son las mismas".
Otro factor que hace bajar el alquiler ocasional de verano es la desconfianza. Por ambas partes. "Antes alquilabas sin saber lo que ibas a encontrar, ibas a tu destino y a ver qué pasaba, pero ahora la gente no se fía y antes de alquilar un piso lo van a ver varias veces para asegurarse de qué es lo que buscan. Y si no hay contrato, les echa para atrás". Eso, en cuanto al arrendatario. El arrendador no sabe con quién se la juega y, además, la necesidad de inscribirse en un registro en el Principado de Asturias para alquilar pisos turísticos "echa atrás a muchos propietarios", que van a lo seguro con el alquiler anual.
Con todo esto, el panorama veraniego en Candás se conforma con una población ocasional casi idéntica año a año. "Es gente que pasa el verano entero. Por proximidad, pueden ir a trabajar y volver en el día, se trasladan los dos meses", indica Patricia Martínez.
La tendencia vuelve a ser la compra. Principalmente de segunda mano. "Hay alguna promoción en marcha, pero es venta sobre plano y ahora es complicado vender así". La bajada de los tipos de interés está facilitando el mercado hipotecario. Y los bancos vuelven a abrir la mano, cerrada durante los años de la crisis. "Pero la venta se centra en la segunda mano" y las agencias se dedican "a la venta, dejando el alquiler como un complemento". En ese sentido, la opción más favorable para las agencias es "trabajar con paquetes enteros para empresas y agencias de viajes, ofertando bloques enteros de apartamentos".
Pese a todo, los profesionales del sector son optimistas y confían en que haya un repunte de la construcción en los dos próximos años. Se destinará a la venta, pero también podrá aumentar entonces la oferta del alquiler para las vacaciones.
