El Presidente de Carbunión, Victorino Alonso, ratificaba estas palabras y consideraba que, sin que se haya definido nada, «ha sido la reunión más positiva de todas las que ha habido y yo estoy satisfecho. Ya sabemos que los presupuestos son inamovibles y que con los mismos las empresas cerramos por lo que una solución puede ser trasvasar partidas de la reactivación a ayudas directas a las empresas». Esta posibilidad ya fue rechazada por el Gobierno.

Esta propuesta de USO y la patronal también fue rechazada de manera tajante por el SOMA-FITAG-UGT y la Federación de Industria de CC OO porque «la reactivación de las comarcas mineras debe de completarse y es un tema vital». Los sindicatos, como explicaba Felipe López, se mostraron «sorprendidos» por el cariz del encuentro: «Es sorprendente convocar una reunión y decir de primeras que no tiene carácter decisorio». «Hemos dejado claros nuestros planteamientos, que pasan por el mantenimiento de la actividad y del empleo, y el compromiso de que no se cerrará ninguna explotación en 2012. Además, mostramos nuestra disposición a negociar un nuevo Plan, pero sin ninguna imposición y sobre la base de solucionar el problema de este año», dijo López, que sentenció: «Queremos una solución y al final la encontraremos, por una vía o por otra, pero la lograremos».

Víctor Fernández, secretario de minería de FITAG-UGT, consideraba que «el Gobierno ha perdido la oportunidad de oro para darle una salida viable al conflicto. Veremos qué pasa en la Comisión de Seguimiento porque veníamos con todo el ánimo de desbloquear el conflicto, que ya todo el mundo sabe por donde pasa, y a partir de ahí comenzar la negociación del Plan hasta 2018».

El secretario de Industrias Extractivas de CC OO, Juan Carlos Álvarez Liébana, señaló que, «pese a que no ha habido nada concreto, he podido percibir que el Ministerio ha abandonado su prepotencia, y veo que si el Ministerio es receptivo y tiene otro talante y voluntad de llegar a acuerdos podamos avanzar. Eso sí, nuestras líneas rojas pasan por garantizar la continuidad del sector y el empleo. A partir de ahí todo es posible. Queremos más que nadie que esto se resuelva. No será sencillo, pero por nuestra parte no va a quedar...».

En este sentido, José Ángel Fernández Villa dejó claro por dónde puede ir la posible solución: «El documento que acordamos con la patronal el pasado 20 de julio, a partir de ahí puede desbloquearse el conflicto». Horas más tarde, Villa también reconocía que la movilización está pasando factura a los mineros. «Partimos de la firme convicción de que la situación actual en la que nos encontramos, después de un largo periodo de movilizaciones, de marchas, de encierros -que aún hoy continúan-, está produciendo un impacto en la economía y en el bienestar de las familias de los trabajadores, aún cuando se han negociado acuerdos con entidades financieras, y que no se puede llevar al límite a los trabajadores». Por ello, indicó «agotaremos la negociación para llegar a un acuerdo pensando en resolver esta situación sin hipotecar ni el presente para 2012, ni el futuro para el periodo a partir de 2013».

Ya por la tarde, las concentraciones de apoyo a los 10 mineros encerrados en los pozos Candín y Nicolasa, en Langreo y Mieres, respectivamente, volvieron a reunir a cientos de personas. El delegado sindical del SOMA-FITAG-UGT en San Nicolás, Roberto Ordóñez, aseguró que «cada vez son más los que vienen a apoyar a los mineros encerrados». En cuanto a su estado de ánimo, aseguró que «están muy animados y con expectativas tras la reunión en Industria». También aprecia esperanza entre los familiares «que vienen todos los días».