La Consejería de Educación Cultura y Deportes del Principado de Asturias se está planteando financiar por primera vez una campaña de investigación en la Carisa. Hasta ahora, el Gobierno regional se había mantenido al margen del estudio de este emblemático lugar, que puede albergar el primer asentamiento romano dentro del territorio que ocupa actualmente Asturias. Fuentes de Patrimonio confirmaron que están estudiando un proyecto presentado por la arqueóloga Esperanza Martín, junto a otros expertos, que tiene como objetivo conocer la historia de los campamentos de Curriel.los y Picu L.lagüezos y establecer una relación entre los yacimientos y la Vía Carisa.

Los trabajos técnicos que se desarrollarán dependen de la financiación. El proyecto presentado por los expertos incluye sondeos, excavaciones y labores de teledetección para encontrar nuevos restos. La Consejería no ha avanzado ninguna fecha sobre el reinicio de los trabajos porque «estamos pendientes de la búsqueda de financiación y de la tramitación administrativa», tal y como apuntaron responsables del área de Patrimonio.

No hay nada seguro, pero el anuncio de la Consejería de Cultura ha sido una gran sorpresa para todos. Las primeras campañas arrancaron en 2001 y sacaron a la luz el campamento romano de Curriel.los y el poblado astur-visigodo de Homón de Faro. El primer yacimiento supuso una gran revelación, ya que es el campamento romano que se encuentra a una mayor altitud en Europa. Estas excavaciones, encabezadas por el experto Jorge Camino, estuvieron financiadas a través de un mecenazgo de Cajastur.

Los trabajos finalizaron en 2009 y después hubo un largo silencio de tres años. En 2011, hubo una nueva campaña muy modesta destinada a encontrar alguna evidencia en el Picu L.lagüezos. Un grupo de arqueólogos había divisado una construcción circular en el monte desde una avioneta y los ayuntamientos de Lena, Aller y Villamanín pagaron los primeros sondeos. En tres días, hubo un descubrimiento sin precedentes: la moneda más antigua encontrada en Asturias, emitida en el 90 antes de Cristo, y material bélico de origen romano.

Esperanza Martín fue la encargada de dirigir estos últimos trabajos, que han sido clave para llamar la atención de Cultura. Hasta ahora, la aportación del Principado a la Carisa se limita a unas fotografías aéreas y una subvención de 5.000 euros para la celebración de un Congreso en el año 2008. El Principado tampoco ha tramitado la petición de convertir el entorno en Bien de Interés Cultural (BIC).