Los ciclistas quieren que las estaciones de esquí de Asturias pasen el verano sobre dos ruedas. Usuarios y deportistas de la región reclaman al Principado que ponga en marcha "bike parks" (lugares acondicionados para el paso de bicicletas) en los complejos de Fuentes de Invierno (Aller) y Valgrande-Pajares (Lena) durante el verano. Es una idea que ya han hecho realidad en los complejos invernales de Sierra Nevada (Granada), La Molina (Pirineo Catalán), Panticosa (Huesca), Vallnord (Andorra) y Manzaneda (Ourense).
Cambiar esquíes por bicicletas es una fórmula para amortiguar el parón que llega cuando ya no hay nieve cubriendo las pistas. En Pajares ponen en marcha el remonte durante los fines de semana estivales, un recurso más para llamar a los turistas, pero los días de diario veraniegos se llenan de quietud y silencio. El complejo despertó ayer cubierto por una niebla densa y rociado por el orbayu. Una estación desierta, con los remontes parados, las cafeterías cerradas y los montes sin turistas. Sólo un rebaño de vacas ocupaban las pistas sin saber que, a partir de diciembre, ese lugar estará lleno de esquiadores con ganas de nieve.
A un par de kilómetros de Brañillín, un grupo de cicloturistas llegan al alto de Pajares ya casi sin aliento. Encabeza la marcha Carlos Ribera, de Valladolid. "Tenemos previsto subir al Cuitu Negru, pero no sabemos si podremos llegar por el mal tiempo", explicó el deportista. Es un gran aficionado a la bici y ha visitado varias estaciones reconvertidas en "bike park" cuando ya no queda ni una gota de nieve. La última, durante el pasado verano, en el Pirineo Catalán.
Ribera considera que "sería una gran idea que estas estaciones también contaran con recorridos para bicicletas, porque es una lástima que estén tan quietas estos días". Convertir una estación en un "bike park" no es difícil, pero las inversiones son necesarias: acondicionar recorridos y preparar los remontes para las bicicletas sería el comienzo. También dar actividad y mejorar los servicios, ya que el objetivo es llamar a un público numeroso. Las experiencias que ya están en marcha, no obstante, apuntan a que los usuarios siguen siendo menos en verano. Sierra Nevada pasa del millón de esquiadores a los 30.000 ciclistas.
Es posible que la financiación no llegue, pero en Asturias no falta potencial. Según Ribera, "aún sin un acondicionamiento particular para las bicicletas, Pajares tiene mucha fama". Él y sus compañeros -Rober Navarro, Javier Grande, Iván Santa Basilia y Roberto Bartolomé- afrontaron ayer la subida al Cuitu Negru por primera vez, aunque tienen compañeros que ya la han hecho. "Lo mejor, dicen por los foros, es la bajada", destacó Navarro poco antes de reiniciar la marcha.
Siguen muchos su ejemplo durante el fin de semana y Valgrande-Pajares ha sido la sede de varias competiciones a dos ruedas a lo largo del verano. En concreto, el Trail Montaña, el Campeonato de Descenso en BTT, el Campeonato Autonómico de Trial y el Desafío Valgrande-Pajares (suspendido finalmente por falta de inscripciones). También se celebró en el complejo, entre los días 2 y 9 de agosto, el Campus Infantil y Juvenil de la Federación de Ciclismo del Principado de Asturias.
Los clubes cicloturistas consideran que hacer realidad su idea no puede ser difícil, al menos, en Pajares. La estación lenense se ha consolidado como un referente en los últimos años para el turismo sobre dos ruedas, un impulso concedido en buena parte por el final de la etapa reina en Cuitu Negru de la Vuelta Ciclista a España (en el año 2012). En Aller, por el momento, habrá que esperar. La Declaración de Impacto Ambiental (DIA) vigente no permite ninguna actividad durante el estío. Ni siquiera los deportes sin motor.
