La obra de la carretera del alto de Santo Emiliano (AS-111), que durante años fue la principal vía para la unión entre los valles mineros del Caudal y el Nalón, marcha a buen ritmo. Las labores se están centrando ahora en mejorar la seguridad de los conductores y peatones, con la instalación de barreras en la Avenida Sama, en Mieres. La mejora de esta carretera, que conecta Mieres y Langreo, cuenta con una financiación de más de medio millón de euros.

La actuación era una antigua reivindicación vecinal. La carretera llevaba años sin recibir ninguna atención y estaba muy deteriorada en algunos tramos. El firme presentaba baches y grietas y el pavimento era muy deslizante, una situación que empeoraba con la llegada de las heladas y las precipitaciones. La Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente anunció las obras a mediados del año pasado.

Las labores, que fueron adjudicadas a la Unión Temporal de Empresas (UTE) Contratas Iglesias y Ecoasfalt, se prolongan a lo largo de los 12,5 kilómetros de la calzada. La contratación se produjo en noviembre del año pasado, con un plazo máximo de ejecución de siete meses. Además, la financiación se aprobó de forma plurianual: 140.000 euros con cargo al anterior ejercicio y el resto, más de 400.000 euros, estaban reservados en los presupuestos regionales que no se llegaron a aprobar. La actuación, a pesar de la prórroga presupuestaria, no se ha paralizado en ningún momento.

La mejora del firme es el principal objetivo de las obras. Los trabajos contaron con la aplicación de un tratamiento antideslizante, a través del "microaglomerado en frío". Esta actuación, según lo previsto, se extenderá a lo largo de once kilómetros de la vía. En cuanto a la seguridad, Fomento proyectó la instalación de las barreras y otras mejoras. La Consejería encargó la reposición de señales verticales y el pintado de las marcas viales, casi desaparecido por el paso del tiempo y el continuo desgaste producido por el tránsito de vehículos.

La renovación de la vía en la vertiente mierense llega después de una obra previa en la zona del Nalón. Por la carretera AS-111 transitan cada día alrededor de 3.000 vehículos, según los datos manejados por la Consejería de Fomento. La vía formaba parte de una larga lista de carreteras que no reunían las mejores condiciones y que se incluyeron en el informe del plan director de infraestructuras para la movilidad de Asturias 2015-2013. En concreto, la vía de Santo Emiliano estaba catalogada como en "mal estado" y los responsables regionales apuntaban a la necesidad de repararla con la mayor rapidez posible. La obra arrancó sólo unos meses después de que se publicara el informe.