Una valla de seguridad a lo largo de cien metros "para separar la vida de la muerte". Esta es la frase con que la asociación El Bloque de Ribono resume su reclamación para que se repare la carretera de Camino de Ribono. Se trata de la vía que da acceso, entre otros pueblos, a Paxío: localidad muy frecuentada en verano porque tiene una piscina al aire libre.
La alarma cundió entre los vecinos el año pasado, después de que se produjeran dos accidentes espectaculares: con menos de un mes de diferencia entre ambos sucesos, dos coches quedaron colgando del precipicio. Afortunadamente no hubo que lamentar daños personales, pero las maniobras para devolver los coches a la carretera fueron muy complicadas. "Esos sucesos pusieron los pelos de punta a todos", aseguraron desde la entidad.
Fueron accidentes que conmocionaron al municipio, y para los que hubo una respuesta municipal. Los responsables de El Bloque de Ribono aseguraron ayer que "el equipo de Gobierno del Ayuntamiento se apresuró a salir en prensa afirmando que se atendería la demanda de los vecinos". "Pues bien, a fecha de julio de 2016, no se ha instalado en la carretera ni un sólo metro de valla de seguridad", clamaron ayer. Van más allá y denuncian que el gobierno local, "conocedor del riesgo existente, sigue jugando con la seguridad de quienes se ven obligados a circular a diario por esta carretera".
Y no son pocos. Según explicaron los vecinos, "la zona tiene mucho tráfico porque no hay transporte público". Situación que se agrava en verano, consecuencia de los bañistas que acuden a Paxío. La asociación El Bloque de Ribono deja claro que su petición "no hace referencia a la limpieza, ni a un bache. Estamos hablando de seguridad, de la posibilidad de que se produzcan accidentes y se cobren vidas humanas". Exigen una respuesta inmediata: "No queremos un gobierno que luzca compromisos, queremos una obra urgente que dé la seguridad que necesitamos".
