Trescientos sesenta kilos de miel para endulzar la fiesta de Los Nabos de Sotrondio. El programa del tradicional encuentro, que está marcado en rojo en el calendario festivo de las Cuencas, incluyó ayer la celebración de la XXV Feria de la miel en el patio del colegio Rey Aurelio. La cita, organizada por la Asociación de Apicultores (Apivana), reunió a doce expositores.
El público asistente a la feria encontró miel de calidad y sin competición en los precios. La organización estipuló un precio único para el dulce, ocho euros el kilo de miel, con independencia del productor o el tipo de dulce que estuviera a la venta. Estaba previsto que cada expositor ofreciese al público cerca de treinta kilos de miel, así que el total alcanzó los 360 kilos. Son cifras similares a las que manejaron en anteriores ediciones de la cita, que cumplió doce años con buena afluencia de público.
La emoción llegó con el galardón "Casiellu de Oro" que Apivana entregó, en esta edición, a título póstumo al apicultor Antonio García García. Este productor de Blimea estaba muy implicado en el seno de la entidad y se mostraba siempre dispuesto a colaborar en las actividades.
Fuera de la feria, también hubo fiesta. El programa de los Nabos incluyó actividades para los más pequeños y un tradicional amagüestu con la Banda de Gaitas "Rey Aurelio", en la carpa. La obra "Tu, yo y el vecín" cerró el telón de la fiesta, hasta el próximo año.
