El club deportivo Santa Marina ha sufridos tres robos en doce días -el último el pasado jueves- con unos daños por valor de 3.500 euros Los ladrones, que actuaron con nocturnidad, entraron en el campo de fútbol de Ablaña, donde entrena el equipo llevándose ordenadores, suministros y material de mantenimiento.
El coordinador del club, Marcelino Montila, explicó que los cacos accedieron al recinto por un muro y entraron en las oficinas y el bar del equipo "cortando las ventanas". El primero de los robos se produjo el 21 de noviembre, y volvió a repetirse el 28. El último fue el pasado día 1. El club puso los hechos en conocimiento de la Guardia Civil, que mantiene abierta una investigación sin que haya habido todavía detenciones. En el recuento de los enseres afanados se encuentran dos ordenadores, así como el suministro del servicio de bar. Los ladrones también se hicieron con una motosierra y una desbrozadora, que se utilizan para el mantenimiento del campo, que es titularidad de la hullera estatal Hunosa.
Montila quiso remarcar el problema que supone para un club modesto como el Santa Marina haber sufrido este robo. "Igual para una sociedad de mayor tamaño es más asumible, pero no para nosotros", recalcó. El coordinador del club también hizo hincapié en las condiciones del campo de fútbol cedido en precario por Hunosa. "Estamos muy agradecidos, aunque no nos vendría mal algo de ayuda para reparar los muros".
El Santa Marina no ha sido el único club deportivo que ha sido víctima de los robos en la comarca durante los últimos meses. A mediados de septiembre se produjo una oleada de atracos en los campos de fútbol del Lenense y Turón. En este último, los cacos se llevaron todo el cableado de la instalación eléctrica, un destrozo cuya reparación rondó los 6.000 euros. El Lenense llegó a sufrir hasta cuatro robos y aunque los ladrones no se llevaron nada de valor, sí causaron importantes destrozos.
