El gobierno de Mieres (IU) aseguró ayer que la residencial de mayores Valle del Caudal, aún pese a la "inevitable" disolución del patronato que la gestionaba, seguirá siendo un organismo autónomo. Los gestores municipales rechazaron así las críticas del grupo municipal socialista, partido que acusó previamente a IU de pretender integrar esta instalación dentro del área de Derechos Sociales, sin ofrecer alternativas para que el movimiento vecinal y los sindicatos puedan seguir ejerciendo labores de control, como venían haciendo hasta ahora a través de patronato.
"El PSOE debería hacer mejor los deberes y no exigir lo que ya se está haciendo. Algo que los socialistas tendrían que saber después de meses de analizar y abordar este tema con los grupos y en el propio patronato", señalaron ayer los portavoces del gobierno local. Los gestores de IU aseguraron que está prevista la creación de un consejo asesor en el que el movimiento social y ciudadano tenga voz. "Si hubiéramos querido dejar fuera a alguien no plantearíamos este consejo, pero la realidad es que queremos que tengan voz, que participen".
El Gobierno local negó ayer tajantemente el oscurantismo del que habla el PSOE en relación a "un proceso del que se lleva informando y hablando desde hace meses". A su juicio se trata de "otro intento más de los socialistas de confundir sobre un procedimiento que es, además, obligatorio para legalizar la situación de la residencia". Los portavoces del equipo de Aníbal Vázquez remarcar que "ante los intentos de algunos de confundir a la opinión pública con manipulación y argumentos que no se sostienen, el equipo de gobierno tiene clara su prioridad: que la residencia funcione mejor y que las personas que viven allí tengan la mejor calidad de vida posible". A este enfrentamiento político se llega después de todos los integrantes del patronato forzasen al gobierno local, con una petición por escrito, a convocar una reunión del organismo.
