El valle de Aller siempre ha sido un referente en el turismo de nieve en Asturias. La presencia de una estación como la leonesa de San Isidro atraía a miles de personas. Sin embargo, en municipio allerano quería su propio complejo invernal, y sabía dónde hacerlo. Hace dos décadas se comenzaba a hablar de Fuentes de Invierno. El próximo día 31 las instalaciones cumplirán sus primeros diez años abiertas. Tras una década, ahora miran al futuro con la unión con San Isidro como objetivo, para formar la estación más competitiva de la Cordillera.
En la todavía joven historia de Fuentes de Invierno hubo dos actores fundamentales para su puesta en marcha: el por entonces alcalde de Aller, Gabriel Pérez Villalta, y el ex director general de Deporte, Daniel Gutiérrez Granda. Dos hombres de carácter que levantaron una estación que hoy supone un agente dinamizador de la economía en el municipio, golpeado, al igual que todas las Cuencas, por el fin de la minería. Villalta rememora para LA NUEVA ESPAÑA como se comenzó a gestar la estación y como llegó el proyecto a su mesa. "Los paisanos de aquella zona sabían que podía ser esquiable, y vinieron al Ayuntamiento a trasladarnos su propuesta, que yo recogí de buen grado", señala el exalcalde. Redactaron un proyecto, que tardaron un par de años en hacer, y con él bajo el brazo, acudió a Oviedo. Pérez-Villalta era también, por entonces, presidente de la Asociación Comarcas Mineras (ACOM-España), y su influencia política podía sacar adelante el proyecto. Sin embargo, subraya el exregidor, los inicios no fueron fáciles: "Recuerdo que fui a planteárselo al Presidente del Principado, Vicente Álvarez Areces, y no lo tenía muy claro, no estaba muy por la labor", afirma Villalta.
Y fue ahí donde apareció el otro actor principal de la película: Daniel Gutiérrez Granda. El proyecto para construir Fuentes de Invierno llegó a la dirección general de Deporte a comienzos de la década del 2000. El entonces responsable de la política deportiva del Principado explica que "lo primero que nos trajeron era un proyecto desmadrado y desorbitado, con urbanizaciones, polideportivos y una serie de equipamientos que eran imposibles de asumir". Sin embargo, lo que se podía haber quedado en un cajón, Gutiérrez Granda lo transformó en otra cosa. "Le fuimos dando forma y dándole realidad a lo que hoy es Fuentes de Invierno", señala el exresponable de Deporte. "La zona en la que se ubica el equipamiento es tremendamente valiosa paisajísiticamente hablando, y empezamos a trabajar con la idea de construir una estación manejable, adecuada a la posible demanda, sostenible y con futuro", recuerda Gutiérrez Granda, que agregó "al final salió un proyecto equilibrado, como así ha sido".
El Principado encargó el diseño del complejo a uno de los profesionales del país más reconocidos en este ámbito, Ferrán Goya. El catalán apostó por un modelo de estación de pequeño tamaño, destinada a un público familiar y huyendo de las aglomeraciones de los grandes complejos. Sin embargo, el diseñador se encontró con una premisa, el respeto tajante al Medio Ambiente. Daniel Gutiérrez Granda recuerda que "tema medioambiental era prioritario para mí, y aún sabiendo que cualquier estación tiene un impacto al hacer movimientos de tierra, la zona era muy guapa y lo que exigí a los redactores fue un proyecto muy respetuoso". Para el exdirector de Deportes, el objetivo se consiguió: "se blindó bien". Tanto que incluso es muy complicado desestacionalizar la estación por las trabas ambientales a cualquier tipo de actividad.
Después de meses y meses redactando proyectos, ajustando presupuestos, normativas? Llegaría el 30 de marzo de 2004. Pese a que en un principio no estuvo muy de acuerdo con llevar adelante la estación, el entonces presidente, Vicente Álvarez Areces, colocaría ese día la primera piedra de un complejo que a día de hoy ya lleva 10 temporadas de esquí a sus espaldas. Tras tres años justos de trabajos, y una inversión de 12 millones de euros sufragados por el Principado, el 31 de marzo de 2007, Villalta, Areces, Granda, y sobre todo, los paisanos que habían soñado por tirarse ladera abajo en una estación allerana, verían su anhelo cumplido: nacía Fuentes de Invierno.
Cierto es que la estación allerana ya comenzó con alguna carencia, como el suministro eléctrico que se tiene que llevar a cabo con generadores de gasoil, o la falta de un sistema de innivación artificial. Sin embargo, ambos problemas son retos del futuro para el equipamiento del alto Aller.
Villalta y Gutiérrez Granda echan la vista atrás con nostalgia, pero también miran hacia adelante y coinciden en diagnosticar el siguiente paso que debe de dar la estación: "Irremediablemente se debe de unir ya con San Isidro", señalan ambos. Precisamente el exalcalde recuerda que se encontró muchas trabas por parte de la entonces presidenta de la Diputación de León, la fallecida Isabel Carrasco. "No quería ni mal ni bien que se unieran las estaciones", indica Pérez Villalta. El ex director general de Deportes, por su parte, lo tiene meridianamente claro: "Desde el principio mi idea era que se llevase a cabo una gestión conjunta entre la Diputación y el Principado, y es algo fundamental todavía a día de hoy. Se tiene que avanzar hacia la gestión única, es un tema de sentido común". Su propuesta: una conexión física por carretera con autobuses y con un remonte en La Llomba y Riopinos por las pistas.
Mientras que esa esperada unión Llega, Fuentes de Invierno cumple 10 años en un gran estado de salud. Ha logrado consolidarse y atraer a miles de visitantes cada invierno, y sobre todo, a muchos escolares del programa de la Semana Blanca. Sus 8,7 kilómetros esquiables, sus 5 remontes y sus 15 pistas de todos los niveles configuran una oferta reducida pero de gran calidad, según indican los expertos esquiadores. Los paisanos que hace 20 años visionaron la estación están de cumpleaños: Fuentes sopla las velas de su primera década.
Fin de semana
Por otra parte, este fin de semana de práctica del esquí ha estado marcado por el clima, muy desfavorable. La calidad de la nieve fue buena, y las bajas temperaturas permitieron hacer nieve artificial en Pajares. Entre Valgrande y Fuentes de Invierno congregaron, entre sábado y domingo, a 3.207 aficionados. Sumaron 20 kilómetros esquiables.
