Un total de 671 mujeres acudieron el año pasado al centro asesor de la mujer de Mieres en busca de algún tipo de ayuda. El servicio municipal atendió 1.701 consultas sobre todo tipo de cuestiones relacionadas tanto con la violencia de género como con cualquier otro tema jurídico o de recursos que tenga como base la discriminación. En concreto, casi un 25 por ciento de las consultas (423) estuvieron relacionadas con la violencia de género y su ley integral, mientras que el resto se centraron en otros temas como crisis familiares -separación, divorcio, uniones de hecho-, ejecución de sentencias, permisos de residencia, información sobre servicios o tramitación de justicia gratuita.

Sobre las mujeres que acudieron al centro durante el pasado año, 140 fueron nuevas usuarias, mientras que el resto, 531, fueron personas que ya habían requerido ayuda previamente. "Los datos sociodemográficos demuestran una vez más que este servicio es utilizado por mujeres de todas las edades, estados civiles y nacionalidades, si bien la franja de edad que va entre los 40 y 44 años fue la que más consultas centró el pasado año, siendo, además, las mujeres casadas (301) y de nacionalidad española (614) los grupos destacados en cuanto a estado civil y nacionalidad", señalaron ayer los portavoces del centro.

El centro asesor de la mujer desarrolla, además, una importante labor en el seguimiento de órdenes de protección en el concejo coordinando a los distintos organismos que intervienen en los supuestos de violencia de género y garantizando una asistencia integral y especializada a las víctimas. En este sentido, durante el año 2016 el número de órdenes de protección en seguimiento fue de 45. Son un 40 por ciento más de las órdenes de protección que estaban en seguimiento en marzo de 2015. Este incremento responde, según los responsables municipales, a que cada vez hay menos miedo a denunciar.

La concejal de Igualdad, Delia Campomanes, destacó la importancia de "seguir apostando por este tipo de servicios y recursos públicos que se ofrecen a la ciudadanía y que, desde la cercanía, la proximidad y la profesionalidad, permiten atender y solucionar problemas sociales latentes como los relacionados con la violencia de género y la desigualdad".