El Corredor del Nalón (AS-117) reduciría de forma significativa los accidentes con víctimas, hasta en un 25 por ciento, si se realizaran mejoras en el trazado por valor de 10,5 millones. Así lo refleja un estudio de la Asociación Española de la Carretera (AEC) y la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras (SEOPAN), que propone intervenir en 73 tramos de vías de la red de carreteras del país. Sólo dos calzadas asturianas aparecen en el informe. La otra es la AS-19, que conecta Gijón y Avilés y para la que se estima un gasto de 9,9 millones. En ambos casos se plantean medidas como limitaciones de adelantamientos, instalación de bandas sonoras y duplicaciones de calzada, entre otras.
El estudio fue presentado días atrás en los cursos de verano de la Universidad Menéndez Pelayo, en Santander. En las conclusiones del informe -titulado "Seguridad en carreteras convencionales: un reto prioritario de cara al 2020"- se expone que, con una inversión de 730 millones de euros en un total de 1.121 kilómetros de carreteras se lograrían evitar 69 fallecidos y 212 heridos en tres años. Las vías analizadas se dividen en tres bloques. Tanto la AS-117 (Riaño-Puerto de Tarna) como la AS-19 se incluyen en el apartado de tramos de vía de especial peligrosidad. En el Corredor, el tramo afectado va del punto kilométrico 5 al 22,5.
Para los 42 tramos de vía de especial peligrosidad analizados se proponen mejoras relacionadas con la seguridad vial que reducirían, de media, un 25 por ciento los accidentes con víctimas. Las medidas son genéricas y van desde actuaciones de bajo coste hasta otras de mayor envergadura, que implican obras de calado en el trazado afectado.
Entre las medidas de bajo coste de plantean la colocación de firmes antideslizantes, la mejora de la iluminación y de la señalización, la instalación de bandas sonoras, el tratamiento de cunetas, la mejora de accesos y enlaces o la colocación de franjas transversales de alerta. Las actuaciones de mayor calado propuestas para estos tramos de especial peligrosidad se centran en aumentar la capacidad de la vía con fórmulas como las duplicaciones de calzada o la ampliación de la plataforma. Hacer circunvalaciones para evitar el paso por las poblaciones o desarrollar obras de acondicionamiento, modificaciones o mejoras del trazado son otras de las recomendaciones.
En el listado de inversiones necesarias, el informe de la Asociación Española de la Carretera y la Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras fija un desembolso para mejorar el Corredor del Nalón de 10.542.000 euros. En el caso de la AS-19, con 16 kilómetros afectados, se queda en 9.942.000 euros.
