"La palabra es un arma poderosa si se apunta bien al corazón" manifestó Xuan Carlos Castañón, escritor y director del colegio Aniceto Sela de Mieres, en el homenaje al poeta Xosé Antón García, "Pin", nacido en Los Cuarteles de Santa Bárbara en 1961, un acto organizado por la Asociación Cultural "Camín de Mieres" con la colaboración del Ayuntamiento mierense y el Club LA NUEVA ESPAÑA de las Cuencas.

Abrió el acto el escritor Ánxel Álvarez Llano, que declaró que "en el vigésimo aniversario de la muerte de Pin, el propósito de los presentes es que no caiga en el olvido la gente que hizo algo por la cultura en Mieres y por la lengua asturiana". Álvarez, que realizó una reseña biográfica del homenajeado, destacó de éste, además de su precocidad, pues con once años ya compuso sus primeros poemas y a los trece recibió el Premio Nacional de Redacción, "la capacidad de trasladar la tradición asturiana a sus versos. La poesía de Pin era algo diferente, personal y con un poso cultural enorme". "Hemos de recordar a esos escritores mierenses que marcaron una época". A Pin siempre le gustó ir por libre. Ello, tras su prematura muerte, favoreció su olvido" concluyó Ánxel Álvarez.

A continuación, el historiador y concejal mierense Faustino Zapico describió a Pin como "un pionero que, procediendo de una familia de clase obrera, accedió a estudios superiores sin renegar de sus orígenes ni de la lengua asturiana". Esta fidelidad al asturiano supuso, en opinión de Zapico "un techo de cristal que impidió que Pin alcanzara las metas para las que estaba capacitado". "Se perdió un gran talento" finalizó diciendo el edil mierense. Por su parte, el autor y director de la Casa de la Cultura de Mieres Ismael González Arias rememoró los años de juventud, los primeros cursos de lengua asturiana y los veranos en Teverga con Pin cantando vaqueiradas a partir de textos del poeta persa Omar Khayyam.

González Arias recitó varios versos y destacó la presencia entre el público de Julián Burgos, decano de los escritores mierenses en lengua asturiana, algo también expresado por Xuan Carlos Castañón, que recordó los tiempos de la fundación de Conceyu Bable, germen de la actual Academia de la Llingua Asturiana. "Era una época en la que entendíamos lo asturiano de un modo más pasional que político" dijo Castañón. "Pin fue un hombre orgulloso de su lengua que utilizó la poesía y el asturiano como herramientas para amar, entender la vida y protestar".

Después tomó la palabra la escritora Lourdes Álvarez, que reconoció mantener de Pin "recuerdos limpios y frescos de una persona muy moderna y avanzada, de gestos delicados, que aportó mucho a nuestras vidas entre cafés, humo y literatura". Por último, Ánxel Álvarez leyó las palabras del escritor Humberto Gonzalí, que excusó su presencia, en las que se destacaba del homenajeado su gran bagaje cultural. "Pin fue un poeta marcado por su tierra y su tiempo".