Nuevo juicio contra A. G. M., el lenense condenado por la estafa del "caso Shamira" -se hizo pasar por la madre de una niña enferma para recaudar dinero a través de las redes sociales- e investigado por varios presuntos timos. En esta ocasión, A. G. M. comparecerá ante el juez después de que el coche de una mujer miembro de la plataforma de afectados apareciera rayado. La mujer había denunciado previamente a A. G. M. por amenazas a través de Facebook. En concreto, presuntamente, A. G. M. escribió mensajes como Te quemo viva! Métete en tu vida!! Das asco". La vista será en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Lena.

La Plataforma de Afectados por el Estafador de Asturias, como se denomina en las redes sociales, reúne a personas que han denunciado un timo de A. G. M. en la región. Están valorando convocar movilizaciones para "que la ley caiga con todo su peso sobre él". Hay varias investigaciones abiertas y las demandas son de lo más variopinto. Una mujer, Verónica Fontán, denunció que A. G. M. le pidió ayuda para vender un talón de lotería para la investigación del cáncer. Los boletos resultaron ser falsos. A. G. M. alquiló un bar en La Felguera, que desmanteló con la venta de electrodomésticos y muebles a través de internet.

Y el mundo del motor también lo ha sufrido. A una pareja les sugirió arreglar juntos un coche para competir en rallies, pero no llegó a colaborar con la reparación. Según la denuncia, se quedó con parte de la recaudación de patrocinadores. Organizó una carrera y, según las denuncias, recaudó fondos para una competición que no se celebró.

Al cantante Monchi del Valle, tras anunciarse como diseñador, le cobró 700 euros por unos "flyers" que nunca le entregó. Además, tendrá que declarar ante el juez por un presunto timo a inmigrantes. Recaudó más de 400 euros de un senegalés a cambio de "arreglarle los papeles". Hace quince días fue detenido en Pola de Lena, tras ser identificado al volante sin carné.

El caso que ha motivado el próximo juicio se remonta unas semanas atrás. Fue entonces cuando la mujer denunció ante la Guardia Civil que su coche había aparecido rayado. El presunto autor de los hechos hizo rayas de forma intencionada, según parece con un objeto punzante, en todas las puertas del vehículo. La mujer había cursado una denuncia previa con los mensajes amenazantes e insultantes que recibió de parte de un perfil de Facebook que, según su versión, administraba A. G. M. La foto de perfil era la del investigado.

La Plataforma de Afectados por el Estafador de Asturias agradece la rápida intervención judicial y de los cuerpos de seguridad, pero buscan más apoyo social. Los portavoces de la entidad afirmaron ayer que "hay muchas personas que sufrieron un engaño por parte de esta persona y que no se atreven a denunciar". Es por eso que les dejan la puerta abierta: "Nosotros les apoyaremos".