Oviedo, Juan NIETO

Lo que empezó como un hobby se convirtió con el paso de los años en algo más serio. Tanto que, aunque son conscientes de que dedicarse profesionalmente al patinaje artístico es muy complicado, siguen sobre ruedas porque es su pasión. Elsa Rodríguez Velasco y Paola García Cuetos llevan desde pequeñas con los patines puestos. Pertenecen al club Ovetus y en la actualidad son dos de las mejores patinadoras de la región. Así lo confirma su entrenador, Richard Carbajales, que asegura que «las dos son muy buenas y tienen una gran proyección. Son habituales en la selección española». Su última cita con el equipo nacional fue en la Copa de Italia celebrada en noviembre de este año.

Elsa Rodríguez empezó en la Escuela de Llanera con siete años y luego recaló en el Ovetus, club en el que lleva ya 13 años. A lo largo de todo este tiempo, la patinadora ha cosechado grandes éxitos tanto a nivel regional, como nacional e internacional. Pero para alcanzar el éxito, «se necesita entrenar mucho y trabajar casi a diario, lleva mucho esfuerzo», dice Elsa Rodríguez, que paradójicamente es la mayor del Ovetus, que cuenta con 40 patinadoras. «Cuando llegué era la más pequeña, ahora soy la mayor», comenta.

Elsa compagina el patinaje con los estudios. Acaba de terminar Magisterio y ahora cursa Pedagogía. Además, también entrena a niñas pequeñas en el Centro Asturiano. «Cada vez es más difícil y complicado, tiene que gustarte mucho para seguir», explica. Y esa es la cuestión, que Elsa sigue disfrutando de cada entrenamiento, de cada competición, aunque ya se ha planteado en alguna ocasión colgar los patines. «En el 2009 quise dejarlo, pero me llamó la selección española y cambié de opinión», recuerda. Desde entonces, la patinadora es una habitual en las convocatorias del equipo nacional y ya ha participado en varias concentraciones en el Centro de Alto Rendimiento de Sant Cugat. «Cuando me llamaron no me lo podía creer, no me lo esperaba», relata. Ahora, ya piensa en la nueva temporada «donde espero quitarme la espina de los nacionales». Tras el 2013, el futuro no sabe lo que le deparará a Elsa, aunque de alguna manera o de otra, estará ligado a los patines. "Siempre dudo entre lo que debo o quiero hacer, hasta ahora gana lo segundo y aquí estoy. Al final, tanto esfuerzo compensa», añade.

Deportivamente, el 2012 no ha sido la mejor temporada para Elsa. «Podía haber sido mucho mejor, hice buenos entrenamientos, pero luego no competí al mismo nivel», apunta. La patinadora asturiana tiene un amplio palmarés que incluye campeonatos regionales en varias categorías, así como citas nacionales e internacionales como el segundo puesto que logró en 2011 en el Issy París en sénior.

Al lado de Elsa, sobre la pista del Palacio de los Deportes, está Paola García Cuetos que también se puso los patines bien temprano. «Me gusta desde siempre. En el colegio se propuso hacer un equipo de patinaje, pero como nadie se apuntó tuve que venir al Ovetus», dice la patinadora, que suma nueve años en el club. Paola intenta organizarse para compaginar sus estudios de 3º de la ESO con el patinaje. Entrena casi todos los días porque como ella misma dice «hay que ser muy constante y entrenar mucho, si estoy una semana sin patinar ya lo noto», explica. Al igual que su compañera, Paola tiene detrás un palmarés envidiable, donde destaca el campeonato de su categoría en el torneo Issy París de 2011. A pesar de su corta edad, Paola tiene una amplia experiencia en el mundo del patinaje. Habitual en las convocatorias de la selección española y en las concentraciones del CAR, la patinadora asturiana asegura que su próximo reto «es hacerlo bien en el nacional, evitar las lesiones y seguir trabajando y entrenando duro». Paola tiene por delante un futuro más que prometedor, un futuro sobre ruedas.