Oviedo, Pablo ANTUÑA
El equipo del Astur que compite en Regional Preferente, y que está luchando por el ascenso a Tercera, cuenta a día de hoy con doce jugadores formados en la cantera. Un logro que resume la filosofía y la forma de entender el fútbol de un equipo que con 215 chavales es una referencia en Oviedo y en Asturias. «La filosofía del club es que los chavales puedan jugar al fútbol y que la cantera sirva para alimentar al primer equipo», señala Luis Cabrales, presidente del conjunto ovetense.
El Astur quiere situarse en lo más alto del fútbol asturiana. Y pese a que el Sporting y el Oviedo les fichan a los que destacan, no dudan en afirmar orgullosos su potencial. «Tenemos 19 jugadores en Mareo, otros tantos en El Requexón. No se puede frenar esa marcha. Somos una de las canteras más potentes de Asturias. Competimos de tú a tú con el Oviedo y casi ya con el Sporting, aunque nos queda un poco más lejos. El nivel de nuestra cantera lo consideramos bueno en términos generales», relata Cabrales. Y es que el presidente también reconoce que muchos regresan para jugar en el Hermanos Llana: «Nos llevan a los críos, prueban y en ocasiones regresan. La verdad que también tienen derecho a probar. Que regresen habla mucho del potencial que tenemos».
El conjunto ovetense cobra 240 euros a sus jugadores al año que divide en seis cuotas distintas. «Somos de los equipos más baratos de Asturias», incide Cabrales. Y siempre con una contabilidad muy estructurada. «El dinero íntegro del fútbol base va para el fútbol base y el del regional para el regional. Está todo separado», dice el presidente.
A nivel deportivo, el Astur tiene el objetivo de subir a División de Honor con su juvenil, pero tampoco tiene prisas. «Sino se consigue se luchará el próximo año. Además el primera juvenil va bien», dice Cabrales. Y es que en el fútbol campo los equipos marchan según lo previsto. «Salvo un infantil y dos alevines, el resto están todos entre los seis primeros», añade el máximo mandatario.
El Astur quedó subcampeón alevín el año pasado, pero ese éxito solo podría repetirlo en juveniles. La última liga que ganaron fue con el alevín en la última temporada del fútbol once. Y es que a juicio de Luis Cabrales el cambio para fútbol ocho no sido positivo: «Al final están arriba los de siempre y la adaptación al fútbol once es solo de dos meses. A nosotros nos perjudicó y lo digo claramente. El fútbol ocho ha hecho que jugadores con mucho físico se impongan el fútbol técnico».
