Sevilla, Benjamín LEBRATO

Estaba claro que el Open de España era el torneo de Alfredo García Heredia. Cuando el asturiano decía que su objetivo era quedar entre los diez primeros, reconocía sentirse muy seguro con su juego y con su estado de ánimo. Los resultados de las cuatro jornadas le dieron la razón: tres bajo par en las tres primeras, y cuatro en la última; el más regular de todo el torneo. Tanto que al término de su partido de ayer llegaba a la casa club al frente de la clasificación. Al final, sus 275 golpes (13 bajo par) la valían para concluir en cuarta posición, sólo superado por el irlandés Peter Lawrie, el español Ignacio Garrido y el danés Soren Hansen.

El final no pudo ser más emocionante, con Peter Lynn de líder, el madrileño Ignacio Garrido conseguía un birdie espectacular en el hoyo 18, que le daba el play off. En el primer hoyo del desempate los dos jugadores conseguían birdie y nuevamente a empezar. En la segunda oportunidad, Garrido se iba con su segundo golpe al agua dando por sentenciado el Open de España a favor del irlandés con 273 golpes.

Después de cuatro días intensos, de presión, de emoción y de ilusiones, Alfredo García no fallaba y seguía siendo muy efectivo y regular a pesar de que los nervios parecía que iban a poderle en la jornada definitiva. El recorrido comenzó mal, con dos dobles bogeys en los hoyos 2 y 3. Fue un espejismo, pues el asturiano se crecía para encadenar ocho birdies en los hoyos 4, 5, 9, 10, 12, 13, 16 y 17. Por muy poco no fue birdie también en el 18. Su segundo golpe se había ido al bunker, pero sacó la bola de manera magistral y no entró por pura mala fortuna. Le hubiera valido la tercera plaza.

Como muestra de la firmeza y regularidad del juego del asturiano en el Real Club de Golf de Sevilla valga un dato: fue el único que terminó las cuatro jornadas por debajo de los 70 golpes. Las dos decenas de asturianos que siguieron en directo sus partidos estaban felices con la actuación de Alfredo; igual que su primo Germán, que actuó de caddie. «Es el mejor día de mi vida», decía tras la conclusión del campeonato.

Por su parte, Alfredo García comentaba: «El comienzo no fue bueno, pero estaba seguro de mi juego y pudo acabar muy bien la jornada, y estoy encantado con lo que he conseguido. La clave del día fue el par que conseguí en el hoyo 11 a pesar de irme al bunker. Metí un putt que me dio muchos ánimos y después todo fue mejor». Alfredo también tuvo palabras de reconocimiento para el Principado y Masymas por su apoyo, y para la Federación por haberle invitado al torneo.