Avilés, J. C. G.

Josiño no seguirá al frente del primer equipo del Avilés Oquendo. La austeridad que el club pretende imponer con vistas a la próxima temporada impide que el técnico ribadense cumpla su séptima temporada en la entidad.

El detonante de la ruptura no es nuevo: la residencia del técnico en Ribadeo supone un gasto extra para el club que el presidente, Paco Penedo, no está dispuesto a asumir. La misma razón fue esgrimida en la anterior salida de Josiño del Oquendo. La directiva del club avilesino se puso la venda antes que la herida y le negó a Josiño un aumento en sus emolumentos sin que el técnico ni siquiera lo hubiera pedido. «Aunque lo hubiera pedido, no se lo hubiéramos concedido», señala el presidente del Oquendo, Paco Penedo. «Esta temporada no nos podemos arriesgar lo más mínimo en el tema económico. Hasta que no sepamos cuánto vamos a recibir de Fundavi y cuánto en concepto de subvenciones no nos podemos aventurar a ofrecer grandes cifras», abunda el máximo responsable del club. Además, el presidente señala que el dinero que el club se ahorra en el sueldo de Josiño podría utilizarlo en fichar a un jugador.

No obstante la mala temporada del Oquendo, Penedo alaba la labor del entrenador. «Es difícil trabajar en las circunstancias que rodearon al equipo esta temporada y Josiño hizo lo que tenía que hacer», afirma Penedo.

Con Josiño fuera del club, el Oquendo se pone como prioridad la contratación de un entrenador asturiano. Aunque no han trascendido nombres, Penedo asegura que el club tan sólo sopesa dos opciones, una de las cuales podría cristalizar en breve.