Gijón, J. J.

En una temporada en la que el balonmano regional ha dado más disgustos que alegrías, tal vez el Medicentro Gijón haya protagonizado el proyecto más ilusionante de los últimos años. Su presidente Juan de Álvaro está muy satisfecho por la marcha de los acontecimientos y destaca como el logró más destacable el «el respaldo social y de prácticamente todos los estamentos del balonmano, jugadores, padres, directivos, afición... que parecían dormidos desde hace tiempo, creo que este éxito se debe a que todo el mundo remó en la misma dirección».

Juan de Álvaro considera que «el balance de la temporada ha sido muy bueno a todos los niveles. En el social cubrimos con creces el objetivo de los 500 socios y movilizamos mucho público con más de 800 espectadores en algunos partidos. Además hubo mucha unión entre todos. A nivel económico cubrimos el presupuesto, fue complicado pero se cumplió, estamos al día con todo el mundo y a nivel deportivo fuimos de menos a más. Al principio lo pasamos mal pero el final de la temporada fue excelente ganando los últimos 6 partidos lo que nos hizo quedar como el mejor equipo asturiano». El presidente considera que «cuando iniciamos este proyecto en el verano del 2009 creíamos que en Gijón se daban todos los condicionantes para que el club saliera adelante y los hechos nos ha dado la razón».

Los responsables del club trabajan ya en la formación de la plantilla de la próxima temporada que estará de nuevo a las órdenes de Alberto Suárez y en la que estará el 90 por ciento de los actuales componentes. El Medicentro Gijón ha logrado ya una incorporación muy importante como es la del extremo argentino Santiago Acetti con amplio pasado en equipos de la División de Honor B, entre ellos el Grupo Covadonga. «Acetti vino a vivir a Gijón y lleva un par de años sin jugar pero vino a vernos porque quiere volver y por eso podemos tener un jugador de su nivel». El club parte con la ventaja de que va a jugar toda la temporada en el pabellón de La Arena no como en la pasada que tuvo que peregrinar por varias canchas, además los jóvenes, que ya brillaron a un gran nivel en el último tramo de la liga, tienen más experiencia. Por eso el objetivo marcado es seguir creciendo en la medida de lo posible y «con la experiencia que tenemos ajustar los gastos mucho mejor», indica el presidente.

Nadie se pone como exigencia el ascenso a la División de Honor B pero todos tienen la ilusión de lograrlo «si culminan algunas negociaciones que mantenemos con jugadores asturianos que están fuera para que vuelvan se va a hacer una buena plantilla» asegura Juan de Álvaro.

La temporada ha sido buena no sólo para el primer equipo sino para el resto de equipos vinculados al club. Uno de los grandes méritos del Medicentro Gijón ha sido aglutinar a todos los equipos base de la ciudad hasta el punto de que la suya es una de las canteras más grandes de España. Mantener la unión del balonmano gijonés, trabajar con un objetivo común y con los pies en el suelo y buscar la mejor clasificación posible son los objetivos para la próxima temporada, si se logran se habrá dado un paso más para tratar de devolver al balonmano gijonés a donde se merece.