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Los restos del naufragio

Los descartes del Oviedo de esta temporada encuentran acomodo en equipos de Segunda B y Tercera

Alain y David Alba, en El Requexón. IRMA COLLÍN

Los restos del último naufragio azul aún se pueden percibir. El Oviedo dio la final de la temporada pasada 13 bajas, iniciando la enésima reconstrucción con el objetivo ineludible del ascenso a Segunda, el peldaño que más se ha resistido en los últimos tiempos. Carmelo del Pozo se puso manos a la obra para reformar el proyecto que él mismo había construido doce meses antes. A los futbolistas señalados les tocó buscarse la vida lejos del Tartiere. Diez de ellos ya han encontrado acomodo: ninguno en el fútbol profesional.

Incluso uno de ellos, Orlando Quintana, se asegurado el futuro inmediato en Tercera División, en el Villa Santa Brígida. Los otros nueve han encontrado plaza en equipos de la división de bronce: Pol Freixanet (Elche Ilicitano), Salva Rivas (Zamora), David Alba (Fuenlabrada), Javi Hernández (UCAM Murcia), Álvaro Cuello (Racing de Ferrol), Alain Arroyo (Barakaldo), Pardo (Hércules), Héctor Simón (Olot) y Sergio Rodríguez (Sestao River). Aún permanecen sin equipo otros tres exoviedistas: Annunziata, Sergio Díaz e Iván Rubio.

Salvo ejemplos contados no parecen equipos que vayan a estar en la lucha directa por el ascenso. Sí puede ser el caso de Pardo -el Hércules de Pacheta es un recién descendido a la categoría-, de Sergio Rodríguez, el Sestao River lideró el año pasado su grupo; e incluso el de Álvaro Cuello en el atractivo Racing de Ferrol. Pero la idea general es que todos han bajado un escalón tras el varapalo de la temporada pasada.

La situación admite dos lecturas. El nivel de los jugadores fichados el año pasado quizás no era el adecuado para encarar el reto ascenso. Su rendimiento en Oviedo no fue el esperado por la dirección deportiva pero tampoco su caché, queda demostrado ahora, era tan alto como se suponía. Otra visión es que el nombre de los incorporados ha sufrido un perjuicio importante tras su paso por Oviedo. No ocurrió así en otras temporadas: Juanma (Numancia), Nano (Ponferradina), Pelayo (Elche) o Aitor Sanz (Tenerife) salieron hacia Segunda División tras sonados fracasos colectivos.

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