El Berrón-Llanera acabó con la presencia de la Guardia Civil. Las fuerzas de seguridad acudieron al campo para apaciguar los ánimos tras producirse incidentes en la grada.

El presidente del conjunto local, Pedro Riesgo, explica que, después de que les hicieron el segundo gol, "vino un señor, sacó una placa de policía y quiso llevar detenidos en razón de la ley del deporte a dos aficionados por insultar a la gente de Llanera". Riesgo añade que, al no hacerle caso, este señor "llamó a la Guardia Civil". "Luego me enteré de que era el presidente del Llanera y le dije que no era para ponerse así", añade Pedro Riesgo.

Serafín Villanueva, presidente del Llanera, reconoce ser Policía Nacional, pero niega haber sacado la placa. "Faltando diez minutos para el final los espectadores de El Berrón empezaron a insultar gravemente a Llanera. Les pedí que rectificaran y como se enfrentaron a mí llamé a la Guardia Civil. En ningún momento saqué la placa". Villanueva asegura estar "decepcionado con el presidente del Llanera" por no tratar de reconducir la actitud del público y asegura que aficionados del Berrón dijeron que "todos los de Llanera son unos hijos de puta".