La 13.ª edición de la Travesera Integral de los Picos de Europa, celebrada entre Covadonga y Arenas de Cabrales con 74 kilómetros y más de 13.000 metros de desniveles acumulados, se desarrollaba ayer bajo unas complicadas condiciones que llevaron a los primeros clasificados a finalizar el recorrido con más de una hora de retraso respecto a los tiempos del año pasado. Y es que los participantes se encontraron con nieblas en la zona alta que dificultaban la visión en ciertos momentos, y nieve transitable que obligó a la utilización de crampones. La dureza de este año ha supuesto que grandes corredores como Fran Piñera, con el segundo mejor tiempo histórico de la Travesera, abandonara en la Vega de Urriellu, o que el seleccionador asturiano de carreras por montaña, Santi Obaya, lo hiciera en Caín.

El aragonés Antonio Blanco se llevó la victoria absoluta con un tiempo de 12 horas 4 minutos y 33 segundos, por delante de los cántabros Rodrigo Lombardero (12h26:11) y Alejandro Gómez (12h37.48). Cuarto y primer asturiano fue Francisco Sánchez López (GM Cabrales) con 12 horas 40 minutos y 35 segundos.

De forma paralela se disputó la cuarta Traveserina, con 44 km. y 7.000 metros de desniveles, entre Sotres y Arenas de Cabrales. El gallego Ramón Muiños ganó en categoría masculina con 5h23:43 y la asturiana Marta Escudero se imponía en la femenina con 6h28:46. Joan Valls y Diego Cotera completaban el podio masculino, y Claudia Gutiérrez y Cristina Escudero el femenino.

Jueces de la Federación Española controlaron la prueba para que pueda ser homologada tanto a nivel nacional como internacional.