Oviedo, Antonio LORCA

El Unión Financiera tiene esta tarde uno de esos partidos tan complicados como apetecibles. El equipo ovetense recibe al Breogán de Lugo (18.30 horas), un club histórico y uno de los grades aspirantes a lograr el ascenso a la ACB. Un equipo que vendrá acompañado por más de un centenar de sus aficionados. Y no serán más porque las dimensiones del polideportivo de Pumarín no lo permiten. Las entradas están agotadas desde el miércoles.

Los de Carles Marco tratarán de recuperar la alegría que suelen tener en los partidos de casa y que les faltó en la última derrota (70-68) en la cancha del Lleida. Un partido que se perdió en la última acción y en el que sobre todo se echó en falta el espectáculo que sí ofrecieron estos dos conjuntos en el encuentro disputado en el polideportivo ovetense. También habrá cierto afán de revancha por parte de los carbayones. Y es que el Breogán fue muy superior en el partido de ida, en el que ganaron por un claro 95-78. Fue el primer partido que disputó tras su lesión el pívot del Unión Financiera Eduardo Hernández-Sonseca, que en tan solo nueve minutos de juego anotó 10 puntos. Insuficientes ante el partidazo que hizo el base Juan Fernández para los gallegos, con 17 puntos y 9 asistencias.

El que no podrá quitarse la espina de aquel partido será Dani Pérez. El base barcelonés evoluciona bien de la fisura en el radio izquierdo que se hizo hace poco más de un mes, pero el sábado es aún demasiado pronto para arriesgar con su vuelta. Salvo sorpresa mayúscula no saltará al parqué. Más fácil lo tiene Miquel Salvó, que ha sido tratado durante toda la semana de sus problemas de espalda y que debe ser importante para frenar el potencial del Breogán.

En cuanto a la clasificación será también un partido de mucha trascendencia. El Unión Financiera necesita ganar para no descolgarse del grupo de cuatro equipos (Burgos, Palencia, Guipúzcoa y Oviedo) empatados a 16 victorias al frente de la clasificación. El Breogán, por su parte, necesita sumar un triunfo que le ponga a una sola victoria de los ovetenses, con los que tendrían también a favor el basket average en caso de ganar.

Un partido de campanillas en el que Pumarín tendrá que animar como nunca para frenar a jugadores del talento del alero Salva Arco, que la pasada temporada estaba en el Iberostar Tenerife de la ACB, o del base Josep Franch, también con mucha experiencia en la máxima categoría. Enfrente estará un grupo en el que destaca la juventud y las ganas de seguir sorprendiendo en una LEB Oro en la que pocos les esperaban y en la que ahora son muchos los que celebran sus éxitos. Ya han ganado la Copa Princesa y lo que resta de temporada lucharán por volver a hacer explotar de alegría a un Pumarín que hoy les volverá a aplaudir, pase lo que pase, y que no volverá a reencontrarse con su equipo hasta el 10 de marzo, cuando reciba al Tau Castelló. Entre medio tendrá dos partidos a domicilio: el Magia Huesca del exentrenador del Unión Financiera Guillermo Arenas, y el Prat, filial del Joventut de Badalona.