El primer equipo benjamín del Real Madrid se proclamó el sábado campeón de la séptima edición del Trofeo Íscar Cup "Memorial Pedro Sánchez Merlo", una de las competiciones más prestigiosas de España y de Europa en la categoría. Los blancos derrotaron en la final al Rayo Vallecano y se adjudicaron por primera vez un torneo disputado en Medina del Campo (Valladolid) en el que participan prestigiosos equipos como Barcelona, Villarreal o Deportivo de la Coruña. El conjunto madridista es el quinto que gana el torneo tras Barcelona, Milán, Valencia y Atlético de Madrid. El Madrid fue de menos a más en un torneo en el que predominó la igualdad y en el que varios partidos, como la final, la semifinal entre Rayo y Barcelona se resolvieron en los penaltis.

La final deparó un partido competido y con alternativas. el Rayo Vallecano comenzó marcando, pero el Madrid dio la vuelta al partido con goles de Pablo, su capitán y de Paulo Iago, uno de los jugadores más destacados. El Rayo igualó el marcador en la recta final tras un exquisito lanzamiento de falta. El empate llevó al encuentro a la tanda de penaltis para emoción de los presentes. En la ronda de los penaltis, el Madrid tuvo más acierto conquistó el torneo para alegría también de su entrenador, Rubén Barrios, que el año pasado participó precisamente en las filas del Rayo Vallecano.

Más allá de la final, la competición dejó grandes partidos como el de la semifinal entre Rayo Vallecano y Barcelona. Los madrileños lograron igualar un 2-0 en contra ante el que se proclamó campeón el año pasado. El Rayo empató al final con un tanto de Marcos Veiga. Luego, en la tanda de penaltis, el guardameta rayista, Diego, detuvo dos lanzamientos y le dio el Rayo el pase a la final. Por su parte, el Real Madrid se impuso con cierta comodidad al Villarreal (3-0) en las semifinales.

En la final de consolación, el Villarreal se impuso también en los penaltis ante el Barcelona tras un vibrante 3-3. La Íscar Cup Medina registró 337 goles, 4,81 por partido en los 70 encuentros disputados.