Mouhamed Barro (Pikine, Senegal) celebró ayer su 22 cumpleaños con la ilusión de un niño, al menos en el aspecto deportivo. Porque está disputando el primer play-off de su carrera, intentando ayudar al Unión Financiera Baloncesto Oviedo a dar un paso más hacia la Liga ACB. El ala-pívot saldrá hoy con sus compañeros hacia Orense, donde seguirá una eliminatoria que va 1-1 tras los primeros partidos en Pumarín.
"Sabemos lo que tenemos que hacer y cómo jugar", explica Barro con convicción, como si él y sus compañeros hubiesen aprendido la lección del primer partido. "Para muchos jugadores del equipo es el primer play-off, algo muy diferente a la temporada regular. Tenemos que tomarnos cada partido como una final".
Tras jugar dos temporadas en el Claret de Liga EBA, filial del Gran Canaria, a Mouhamed Barro le ha costado adaptarse al ritmo y la exigencia de la LEB Oro. Tras un primer partido frente al Ourense tan desdibujado como el resto del equipo, Barro se creció en el segundo, sobre todo en el aspecto reboteador.
"Después de ver el vídeo del primer partido, nos hemos dado cuenta de nuestros errores y en el segundo salimos con una mentalidad diferente", recalca Barro, que no teme que el equipo baje su rendimiento lejos de Pumarín, como ocurrió a menudo durante la temporada regular: "Esto es diferente. Es un play-off y sabemos lo que nos jugamos".
Por supuesto, Mouhmaed Barro espera resolver el pase a las semifinales el domingo, ganando los dos partidos en la cancha del Ourense, pero tampoco le importaría vivir otra noche de fiesta en Pumarín la próxima semana. Sabe que tendrán enfrente a un equipo con bastantes jugadores veteranos, más acostumbrados a situaciones límite y que pueden condicionar a los árbitros, como los ovetenses creen que ocurrió en el primer partido.
