El Real Avilés ha vuelto a la senda de la victoria tras seis derrotas consecutivas y lo ha hecho esta mañana en el Suárez Puerta a costa de un rival directo por la permanencia, el Atlético Lugones. El partido fue sobrio, no hubo alardes, pero el equipo local acabó firmando un contundente 3-0, una inyección de moral para afrontar la lucha por el objetivo: salvarse.

Tras un primer tiempo en el que los visitantes tuvieron el balón, llegó el gol de Balsera en el minuto 49, en una buena jugada de Gastón, que debutaba con la camiseta blanquiazul. El balón del argentino que buscaba la portería, rebotó en la defensa y le cayó a Balsera, que no dudo en fusilar la portería lugonense. El conjunto visitante siguió intentándolo, pero sin crear ocasiones de peligro, hasta que en el minuto 80, llegó una jugada clave: Nuño coge el balón delante de la portería y chuta, pero la mano del central Mateo se interpone en la trayectoria. Roja y penalti a favor del Avilés. El propio Luis Nuño se encargaría de transformarlo. Jugando en inferioridad, el Lugones estiró las líneas en busca de un gol, lo que acabó aprovechando el Avilés, nuevamente por mediación de Nuño, en la última jugada del choque para poner el 3-0.

Con esta victoria, el equipo blanquiazul empata a puntos con el Lugones, al que además gana el golaverage después de haber quedado 1-0 en el campo lugonense, pero, sobre todo, sirve para marcar la línea de trabajo a seguir.