La compañía gijonesa de ingeniería TSK, propiedad de la familia García y hasta ahora segundo accionista más relevante de Duro Felguera -de la que poseía últimamente el 9,968%-, ha emprendido un plan de desinversión en el grupo que preside Ángel Antonio del Valle. TSK acaba de vender el 5% de Duro Felguera, lo que, sumado a una enajenación previa en septiembre durante la opa parcial lanzada por Duro sobre sus propias acciones, supone que TSK ha reducido su posición al 2,5% tras deshacerse de casi el 7,47% del capital en cuatro meses.

TSK, presidida por Sabino García Vallina, entró en Duro en 2000 cuando, ante la orfandad accionarial de esta sociedad a resultas de la marcha del Banco Central Hispano y del grupo alemán Metallgesellschaft, el Gobierno de Asturias reclamó la incorporación de inversores asturianos. Entraron entonces Imasa, Melca y TSK y Álvarez Arrojo reforzó su capital. TSK llegó a tener el 15,85% de Duro y tres consejeros. En 2007, por diferencias con el grupo Arrojo, dejó el consejo y redujo su participación al 10%. En las últimas juntas generales de accionistas votó en contra de la gestión de Duro por considerar que le faltaba información. Ahora afronta su salida al tiempo que lo hace Vegasol, que también fue el segundo mayor socio del grupo. En los últimos días la familia Ybarra y dos socios compraron el 5% de Duro.

TSK, con una cartera de obra superior a los 1.000 millones, acaba de ser adjudicataria de un nuevo ciclo combinado en Bangladesh, entre otros proyectos.