Las acciones del Banco Espírito Santo (BES) repuntaron ayer más de un 14% en la Bolsa de Lisboa tras conocerse la entrada en su capital de Goldman Sachs y la gestora de fondos estadounidense DE Shaw, y se sobrepusieron, en parte, al derrumbe que acumulaban sus títulos durante las últimas semanas.

La entidad lusa comunicó el martes por la noche a la Comisión del Mercado de Valores del país luso que la entidad estadounidense Goldman Sachs había superado el umbral del 2% en el capital del banco al poseer un total de 127,7 millones del BES, un 2,27% del total.

Esto se produce como consecuencia de la operación que tuvo lugar el pasado 15 de junio, en la que adquirió 89,8 millones de acciones, equivalentes al 1,6% del capital, y 37,9 millones de instrumentos financieros, correspondientes al 0,67% del capital. Por su parte, la gestora de fondos DE Shaw adquirió el 14 de julio, un día antes, un total de 152,6 millones de acciones de Banco Espirito Santo, lo que representa un 2,71% del capital social de la entidad.

A principios de semana, Rioforte, sociedad de la familia fundadora de la entidad bancaria, solicitó concurso de acreedores, al igual que el viernes lo había hecho su matriz, ESI. La familia Espírito Santo tiene el 20,1% del banco, que es ajeno a sus operaciones y que ya no gestiona.