España tiene tantos jóvenes con educación secundaria o inferior como licenciados y diplomados universitarios. Pero el tramo intermedio, el que corresponde a jóvenes con bachiller y FP de grado medio es el más bajo de la UE de los 27, según un estudio realizado por Eurostat. Exactamente la mitad que la media europea. Y es precisamente en ese tramo en el que mayor demanda de profesionales habrá en el año 2020: el 50% de la oferta laboral, mientras que la de titulados superiores será del 35% y de estudios básicos el 15%.
El caso de Asturias es aún más llamativo. El 31% de los jóvenes entre 25 y 29 años tienen estudios básicos, mientras que el 21% están en un tramo medio y el 48% tienen nivel superior, por encima de la media nacional (38%) y de la UE (32%).
Francisco Belil, vicepresidente de la Fundación Bertelsmann, que ha estudiado las causas del elevado paro juvenil en España, advirtió en una entrevista en LA NUEVA ESPAÑA, que el modelo formativo del país "es imposible de sostener si se quiere una sociedad competitiva y con trabajos y salarios dignos". De ahí que insistiera en la necesidad de que se produzca un trasvase de personas con baja cualificación y licenciados y diplomados hacia la Formación Profesional. El modelo que triunfa en las principales economías europeas.
