Las comunidades de vecinos con calefacción central de gasóleo se han lanzado a reclamar a la Agencia Tributaria la devolución del llamado "céntimo sanitario", recargo fiscal sobre los hidrocarburos que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) declaró ilegal hace casi un año y abrió, de esa forma, la espita a las reclamaciones de los afectados. En Asturias, según las cuentas que maneja el Colegio de Administradores de Fincas, han sido ya unos cuatrocientos los edificios que han pedido el reingreso de esta carga tributaria, que los gobiernos autonómicos y central aplicaban sobre el precio final del combustible.
Hacienda se está moviendo rápido, asegura Ángeles Martínez, vicepresidenta del Colegio. "Yo he hecho varias reclamaciones y ya están ingresando los pagos", apunta. La Agencia Tributaria está devolviendo una media de 2.000 euros a cada portal, una cantidad que se corresponde con lo abonado por el impuesto más los intereses generados estos años. "Es un dinero que en momentos como éstos viene bastante bien recuperar", asegura. La crisis ha disparado la morosidad en las comunidades de vecinos y ha puesto la contabilidad de muchas de ellas contra las cuerdas.
Los edificios residenciales con calefacción central a gasóleo tienen derecho a reclamar lo cobrado de más por el céntimo sanitario en los ejercicios 2010, 2011 y 2012. "Para nosotros fue relativamente sencillo realizar las reclamaciones, ya que estamos obligados a guardar este tipo de facturas por un periodo de cinco años", apunta Martínez. En Asturias, resalta, la mayor parte de las peticiones del reintegro se ha realizado desde Oviedo, ya que en Gijón el número de comunidades con ese tipo de calefacciones es más modesto.
Por su parte, los camioneros, el colectivo más afectado por el abono del "céntimo sanitario", también están comenzando a recibir el dinero, pero a cuentagotas. Ovidio de la Roza, presidente de la patronal asturiana Asetra y líder del Comité Nacional del Transporte (CNT), asegura que el dinero está llegando a las empresas del sector "a un ritmo menor del que nos gustaría". De la Roza ha solicitado una reunión con representantes de la Agencia Tributaria y del Gobierno para solicitar información de cuántos pagos se han hecho. Según explica, uno de los problemas es que en Hacienda hay un fuerte atasco de reclamaciones por parte de camioneros, comunidades de vecinos, empresas e, incluso, algunos particulares. En un principio, el fisco había puesto algunas trabas a los camioneros para realizar los reembolsos. Al final se llegó a un pacto para el pago íntegro de lo cobrado de más.
