El Gobierno ha fijado para cinco comunidades autónomas (Baleares, Castilla-La Mancha, Cataluña, Murcia y Comunidad Valenciana) un objetivo de deuda pública en 2016 superior a la media nacional, que se ha establecido en el 22,5% del Producto Interior Bruto (PIB). Para Asturias se ha fijado un objetivo de deuda del 16,3% del PIB, uno de los menores del país, sólo por encima de Madrid (13%) y Canarias (15,1%). En el otro extremo, para Baleares se ha fijado un objetivo del 29,1% del PIB, para Castilla-La Mancha del 33%, para Cataluña del 31,4%, para Murcia del 25% y para la Comunidad Valenciana del 38,2%.