Arcelor-Mittal es una de las 25 empresas finalistas para comprar la planta italiana de Tarento, ahora en manos del Gobierno transalpino. La multinacional siderúrgica aseguró ayer a los sindicatos, durante una reunión del comité europeo que tuvo lugar en su sede de Luxemburgo, que tiene bastante interés en adquirir esta gigantesca instalación industrial, con capacidad para fabricar más de diez millones toneladas, más del doble de lo que pueden producir las plantas asturianas de la siderúrgica. En la puja están otras empresas como Finarvedi, Marcegaglia o Erdemir. Algunas interesadas sólo en hacerse con una parte de este conglomerado industrial.

En abril, el Ejecutivo italiano facilitará a las empresas que están interesadas las cuentas de la planta de Tarento, que atraviesa desde hace años por importantes problemas medioambientales. El proceso de venta puede resolverse antes del 30 de junio, según los plazos que presentó ayer a los representantes sindicales la multinacional.

En la reunión la dirección de la siderúrgica también les aseguró a las centrales que espera que este año la demanda de acero crezca en Europa un 2,2%, pese a la fuerte amenaza del acero barato que llega desde China.