La fábrica de Arcelor-Mittal en Veriña asumirá el 15% de la producción (unas 90.000 toneladas) que estaba realizando hasta ahora la planta de Zumárraga (Guipúzcoa), según afirmó ayer en Vitoria Leo Bote, presidente del comité de la instalación vasca, que será clausurada a causa de la competencia china, con precios muy baratos y por debajo de coste.

El dirigente sindical guipuzcoano sostuvo que el 85% restante de la producción de Zumárraga podría ser desviada por Arcelor-Mittal a otros centros de producción del grupo en Europa.

De los 342 trabajadores de Arcelor-Mittal en Zumárraga (la instalación daba trabajo indirecto a otros 350 más contratas, empresas auxiliares y transportistas), la empresa ya planteó a la plantilla la posibilidad de recolocar a unos 270 aproximadamente en la fábricas de Veriña.

El comité de empresa de Zumárraga reclamó ayer en Vitoria a las instituciones vascas que den un "paso al frente" para conseguir el mantenimiento de la actividad industrial y del empleo de la planta guipuzcoana y advirtieron de que los plazos de negociación con la empresa "se agotan".

Los representantes de los trabajadores aseguraron, en una comparecencia a petición propia ante la Comisión de Desarrollo Económico y Competitividad del Parlamento vasco, que el traslado a Asturias entrañaría una "modificación sustancial" de las condiciones de trabajo.

El 7 de abril se constituyó una mesa negociadora entre el comité y la empresa con el que se inició el periodo de consultas, cuyo plazo legal (15 días) finalizó el pasado viernes. Sin embargo, la empresa decidió alargarlo y están previstos dos encuentros esta semana, que han sido convocados para hoy y para el próximo viernes.