Cada año los llamados contratos menores de las Administraciones públicas, aquellos que no superan los 50.000 euros en casos de obras y los 18.000 en otros conceptos como compras, mueven en Asturias unos 1.421 millones, pero si se hicieran en plena competencia podrían ahorrarse 200 millones. Supondría un menor desembolso y se atajarían casos de corrupción que se resguardan bajo este opaco sistema de contratación. Esa fue la base que ha llevado a una empresa asturiana, Nessmeeting, a poner en marcha una plataforma digital para permitir que este tipo de relaciones comerciales se realicen de forma más abierta y transparente. "A partir de ahora cualquier compañía podría convertirse en proveedor de la Administración", explicó ayer el director general de la compañía, Roberto Gómez, durante la presentación de esta herramienta en la sede de la patronal asturiana, Fade. Hasta ahora la opción de competir por los contratos menores estaba cerrada para una mayoría de empresas.
El problema, señaló Gómez, es que hasta ahora este tipo de contratos públicos se hacían de forma bastante opaca, ya que al ser cantidades pequeñas las administraciones no tenían porque abrirlas a la libre concurrencia. Pero la UE ha impulsado una norma para que las centrales de compras sean completamente electrónicas a partir de octubre de 2018. "Esta herramienta permite a cualquier empresa que se dé de alta ver toda la información en tiempo real y optar a emitir un presupuesto directamente con un sistema más ágil que corta los amiguismos en las compras públicas y garantiza la igualdad de oportunidades", resaltó Gómez.
Hasta el momento, la plataforma, una página web desde la que se puede gestionar este tipo de contrataciones, cuenta con 1.292 empresas de alta, y controla las licitaciones menores de la Inspección Técnica de Vehículos de la región (ITV), de la Sociedad Pública de Gestión y Promoción Turística y Cultural del Principado (Recrea) y algunos ayuntamientos como el de Mieres, Lena y Tineo.
