Apple pagará 38.000 millones de dólares (31.000 millones de euros) de impuestos en EE UU por repatriar beneficios obtenidos en el extranjero, tras la reforma fiscal de Trump. Antes, los beneficios tributaban 35% al ser "repatriados". La reforma permite pagar el 8% para activos no líquidos y de 15,5% para el dinero.