En España existen dos colectivos reivindicativos de camareras de hotel: la ovetense Ana Núñez, que fue gobernanta del hotel de La Reconquista, es vicepresidenta de Kellys Unión Asturias, integrada en Kellys Federadas. La gijonesa Pilar Cazorla, que el jueves le mostró al presidente del Gobierno la minusvalía del 33% que sufre en una mano por una dolencia profesional ("tenosinovitis estenosante") propia del oficio, es portavoz en Asturias del grupo Las Kellys.

Núñez acusó a la reforma laboral del PP de 2012 de la externalización y malas condiciones laborales. Reclama que prime el convenio de sector, la ampliación de la lista de enfermedades profesionales, limitar la carga de trabajo, permitir jubilaciones anticipadas, reconocimiento de la misma categoría laboral que a los camareros de hostelería y otras. "No sé qué tiempo nos llevará pero lo vamos a lograr porque no vamos a parar de luchar", dijo. Pilar Cazorla le pidió a Rajoy que "no hubiese ninguna Pilar más, que nadie pase por lo que yo he tenido que pasar", con "jornadas laborales interminables".