Casi 83.000 asturianos se encuentran en situación de riesgo de pobreza laboral a pesar de la recuperación económica y de que Asturias se colocó el pasado año a la cabeza del crecimiento en España. Además, un tercio de ellos tienen estudios universitarios. Los datos los aporta un estudio sobre vulnerabilidad ante el empleo elaborado por el asturiano Florentino Felgueroso, investigador de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) y profesor en excedencia de la Universidad de Oviedo.
El autor apunta que su trabajo de investigación, en el que participaron varias entidades sociales como Cruz Roja, Iserta, Fundación Secretariado Gitano o Foessa, nace "de la insatisfacción que generan los indicadores disponibles de paro, precariedad y pobreza laboral para cuantificar y caracterizar las personas con mayor vulnerabilidad". Para identificarlas, Felgueroso utiliza una nueva metodología y acuña el término "población especialmente vulnerable ante el empleo", en la que están, según la investigación, el 12,8% de los asturianos en edad de trabajar, los que tienen entre 16 y 64 años.
Esa población especialmente vulnerable está formada en Asturias por 82.842 personas y engloba a las que viven actualmente en hogares de bajos ingresos (ningún miembro está empleado o los ingresos laborales por unidad de consumo son inferiores al 60% de la mediana de la de todos los hogares) o de baja intensidad laboral (cuando el cociente entre las horas semanales trabajadas y las potenciales entre todos los miembros del hogar es inferior a 0,2) y al mismo tiempo o están en situación de inactividad (aunque deseen trabajar y estén disponibles) o en situación de paro o en situación de precariedad laboral (personas de 16 a 24 años que estén fuera del sistema educativo reglado o personas de 24 a 59 años que trabajan pero no consiguen una retribución superior al salario mínimo interprofesional anual a tiempo completo). Y además esas personas seguirán muy probablemente atrapados en una situación de falta de empleo o de pobreza en el trabajo en los próximos doce meses.
La tasa calculada por el estudio de población especialmente vulnerable ante el empleo de Asturias, del 12,8%, está ligeramente por debajo de la media nacional, del 13,3%. El máximo se registra en Extremadura, con el 23,8%, y el mínimo en Navarra, con el 8,8%. Pero lo que llama la atención de los datos de Asturias es que de las 82.842 personas especialmente vulnerables, 26.828 tienen estudios superiores, lo que representa el 32,4% del total. Es decir, uno de cada tres afectados cursó estudios universitarios, una tasa que no se alcanza en ninguna otra comunidad autónoma. Junto a esos 26.828 asturianos con educación superior hay 20.787 con secundaria postobligatoria, 26.740 con ESO y 8.487 con primaria o menos.
Además del nivel educativo, el estudio aporta otros datos para establecer el perfil de la persona especialmente vulnerable ante el empleo de Asturias. Las mujeres son mayoría (49.771) frente a los hombres (33.071) y por grupos de edad lo más afectados son los de entre 30 y 44 años (un total de 36.065), que superaran en número a los de entre 45 y 64 años (31.855) y a los de entre 16 y 29 años (14.922). Además hay 70.362 personas con nacionalidad española y 12.480 con nacionalidad extranjera.
A nivel nacional los resultados del estudio, impulsado por Fedea y Accenture, señalan que la población especialmente vulnerable ante el empleo en España es de 3.996.000 personas, 172.000 personas menos que hace un año, una tercera parte de lo que ha disminuido el desempleo desde entonces. "Dada la magnitud del problema, es necesario establecerlo como prioritario en las agendas de empresas, donantes, administraciones públicas, entidades sociales...", apunta Felgueroso, que añade que "el reto es muy importante y para tener éxito no podemos abordarlo de forma individual y aislada".
