Los atrasos de la subida de pensiones recogida en el proyecto presupuestario de 2018 (el 1,6% con carácter general, que se eleva al 3% para las mínimas y la subida para las de viudedad) se abonará antes de terminar el mes de julio.
La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, apuntó ayer durante su intervención en el debate las enmiendas parciales al proyecto presupuestario, que, dado que el incremento de pensiones tiene efecto desde el 1 de enero, los atrasos se abonarán en una segunda paga.
No obstante, fuentes del Ministerio Empleo precisaron que el aumento de la base reguladora de las pensiones de viudedad al 56% no tiene carácter retroactivo, por lo que en este caso no se actualizarán atrasos desde el 1 de enero.
Báñez explicó que la subida de las pensiones tiene efecto desde enero pero no se aplicará hasta que entre en vigor el Presupuesto, por lo que la diferencia entre este repunte y el ya aplicado desde principios de año, del 0,25 %, correspondiente a ese periodo se abonará en una segunda paga este verano.
