"Somos la envidia de la izquierda porque podemos jugar con dos equipos a la vez y llegar a más asturianos". Con estas palabras quiso dejar claro ayer la presidenta del PP en Asturias, Mercedes Fernández, que la coalición con Foro goza de buena salud. La afirmación llega en un encuentro con las directivas del Oriente en Cangas de Onís para preparar la campaña electoral y después de que el lunes el secretario general forista, Francisco Álvarez-Cascos, dejara entrever que el Ejecutivo de Mariano Rajoy debería cambiar el trato hasta la agrupación, que llegó a tildar de asaltaescaños en la legislatura recién terminada cuando reclamaban a Cristóbal Montoro y José Manuel Soria la firma de convenios de los fondos mineros. Fernández, que evitó mencionar a Cascos expresamente, sí quiso dejar claro que está "muy satisfecha" con la coalición. "Todos los que obtengan escaño en el Congreso van a apostar porque Mariano Rajoy sea presidente de España y ese es el gran enlace y nexo de unión entre las dos organizaciones", aseguró. Durante el encuentro criticó las políticas de Ciudadanos, que a su entender paralizarían el Ave a Asturias y promueven una subida injusta del impuesto de sucesiones y cargó "contra el viejo planteamiento" socialista de retomar el túnel del Fitu, a la par que apostó por conexiones aéreas económicas con Alemania.