La delegada de Cultura y Deportes del Ayuntamiento de Madrid, Celia Mayer, ha sido citada a declarar en calidad de investigada por prevaricación como consecuencia de una querella interpuesta por la Fundación Francisco Franco por su actuación en materia de memoria histórica.

Según han informado a Efe fuentes municipales, Celia Mayer tendrá que declarar ante el juzgado de instrucción número 27 de Madrid el próximo lunes 21 de noviembre, donde irá acompañada de un equipo de abogados municipales.

En su querella, la Fundación Francisco Franco acusa a la concejal de Ahora Madrid de prevaricación administrativa por la retirada del monolito al Alférez Provisional, llevada a cabo, según defiende el Ayuntamiento, "en cumplimiento de la ley de Memoria Histórica y tras la aprobación de su retirada en el pleno del Ayuntamiento de Madrid".

Mayer ordenó en febrero de este año comenzar con la retirada de los monumentos 'franquistas' de la capital, y levantó en primer lugar la placa por el fusilamiento de unos monjes carmelitas en el cementerio parroquial de Carabanchel Bajo, una lápida dedicada al falangista José García Vara y el monolito al Alférez Provisional en la plaza de Felipe IV.

Tras las críticas unánimes de la oposición por la actuación de la delegada de Cultura, el equipo de Gobierno de Manuela Carmena suspendió la retirada de los vestigios hasta tener desarrollada una normativa municipal que indicase cómo aplicar la legislación y ordenó reponer la placa en homenaje a los carmelitas fusilados al admitir que este monumento no incumplía la ley de memoria histórica.

En cambio, el Ayuntamiento de Madrid no procedió del mismo modo con el monumento al Alférez Provisional, al entender que su retirada sí cumplía la ley de memoria histórica.

La Fundación Francisco Franco advirtió en febrero a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, que interpondría un recurso contencioso administrativo si no reponía en un plazo de diez días el monumento a los 'Alféreces Provisionales', retirado el 2 de febrero.

El monumento, erigido en 1960 y ubicado desde entonces en la calle Felipe IV, frente al Casón del Buen Retiro, fue desmontado y retirado "por la vía de hecho y prescindiendo absolutamente de la normativa legal reguladora", según argumenta la fundación.

La actuación de Celia Mayer en materia de memoria histórica llevó a todos los grupos municipales, incluido el PSOE, a pedir a Manuela Carmena la dimisión de su responsable de Cultura, lo que ella rechazó a cambio de acometer una remodelación del área.

Esos cambios se concretaron un mes y medio después, cuando la alcaldesa quitó a Mayer las competencias sobre memoria histórica y creó un comisionado dependiente de Alcaldía encargado de elaborar el plan de memoria histórica de Madrid.

El PSOE, finalmente, apoyó en el Pleno a Ahora Madrid para evitar la reprobación de la concejal que sí pidieron Ciudadanos y el PP.

La socialista Paca Sahuquillo dirige ese comisionado creado con el consenso de todos los grupos municipales, y a cuya presentación en mayo de este año no acudió la delegada Celia Mayer.

Ya con las recomendaciones de ese comisionado, el pleno municipal acordó -con el voto en contra del PP- retirar las distinciones honoríficas concedidas al expresidente Carlos Arias Navarro, la Organización Juvenil Española (OJE) y la Sección Femenina, entre otras personalidades y organizaciones relacionadas con el franquismo.

Además, ese organismo entregó un informe al Ayuntamiento en el que sugería cambiar el nombre de 27 calles o plazas, entre ellas la de Hermanos García Noblejas, la avenida del General Fanjul y la plaza del Caudillo.