El portavoz del Gobierno asturiano recurrió ayer a unas palabras del honorable Josep Tarradellas para valorar la marcha del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, a Bélgica.

"Como dijo Tarradellas, lo que nunca se puede hacer en política es el ridículo. Son unas palabras que pueden ser aplicables a esta situación", declaró Guillermo Martínez, quien subrayó que, a juicio del Gobierno asturiano, la aplicación del artículo 155 "no era una opción sino una obligación" tras la declaración de la independencia de Cataluña.

El Principado dejó entrever que respalda las decisiones que adopte la Fiscalía en relación al ya expresidente y a los exconsejeros del Gobierno autonómico catalán. "Los incumplimientos de la ley tienen consecuencias jurídicas, como ocurriría en cualquier otro estado de Derecho", valoró Guillermo Martínez tras el Consejo de Gobierno celeebrado ayer en Oviedo.