J. M. C.

«No se puede tener un Ferrari por el precio de un Fiat». Así definió ayer un representante en España de la firma francesa de iluminación Blachere la polémica suscitada en Gijón con las luces de Navidad, instaladas por la empresa Imes a instancias de la Unión de Comerciantes y Autónomos, con un presupuesto de 161.260 euros a pagar entre 2.585 comerciantes y hosteleros locales.

«En el catálogo tenemos cosas preciosas», manifestó un responsable en España de Blachere, «pero el presupuesto de las luces de Gijón es el que es; en Castrillón se han gastado 120.000 euros, y es un municipio mucho más pequeño que Gijón, y en Oviedo casi 500.000 euros; todo depende del dinero que se quiera gastar».

Algo dolidos por la polémica, desde la empresa francesa se sostiene que «nosotros tenemos productos preciosos, pero si nos piden un proyecto de 700 arcos con un presupuesto así tendremos que adaptarnos, nada más. Ahora, sí, lo que se colocó en las calles de Gijón fueron productos nuevos, de calidad y ajustados a las normas europeas, de bajo consumo; ahora bien, los gustos y los colores son de cada persona, pero a la gente que le gusta nunca escribe un comentario, sí lo hacen los que critican».

Desde Blachere se sostiene que el de Gijón «fue un proyecto ambicioso, pero con un presupuesto que fue el que fue y a él nos tuvimos que ajustar, con productos de calidad, pero de la gama media de Blachere». Y desde la firma francesa se recordó que «al principio fue un concurso organizado por Prodintec, con tres proyectos y en ninguno estaba Blachere; con nosotros contactaron debido a que de los tres proyectos ninguno era realizable y en esos tres proyectos se gastó también un dinerito en premios, mientras que nosotros hicimos el proyecto y el presupuesto gratis».

Según el representante de Blachere, «cada uno de esos tres proyectos (presentados al concurso de Prodintec) se embolsó dinero, 15.000 euros el ganador y 5.000 euros cada uno de los otros dos, y esto la gente no lo sabe».

De todas formas, la iluminación navideña instalada por Imes del catálogo de Blachere, afirmó el mencionado representante de la firma francesa, permitirá al Ayuntamiento de Gijón pasar de un gasto en energía eléctrica de 50.000 euros a entre 10.000 y 15.000 euros.

Estas Navidades Blachere se encargó de la iluminación ornamental en Santiago de Compostela, Ferrol, Vigo, Valladolid, Palencia, Alcalá de Henares y muchos pueblos pequeños y también vendió productos para la iluminación de Sevilla.

En este sentido, desde Blachere se insiste en que «Vigo tiene un presupuesto de 400.000 euros, pero si a mí me dan 161.000 euros para montar 700 arcos, claro que no podemos ofertar la gama alta de Blachere».

En Santiago de Compostela, siempre según los presupuestos facilitados por Blachere, se han gastado «110.000 euros sólo para el casco histórico; en Ferrol compraron material por valor de 60.000 euros; el presupuesto de Valladolid es superior a 400.000 euros y en Sevilla rozamos el millón, pero para Gijón hubo que ajustarse a 161.000 euros», señaló el responsable de Blachere.