Román GARCÍA

Una rejilla que no drena correctamente el agua provocó un accidente por el que ahora los responsables regionales deberán pagar. El Gobierno del Principado está obligado a indemnizar a una joven que sufrió un accidente en junio del año 2003 como consecuencia de la falta de mantenimiento de la carretera que une Gijón con Pola de Siero. En la vía existían placas de hielo que provocaron que la joven derrapara con su moto y sufriera un accidente en el punto kilométrico 28,150 de la AS-331.

El juez encargado del caso, Juan Carlos García Robles, de la sala 1 de lo Contencioso-Administrativo de Oviedo, asegura en su sentencia que «las rejillas existentes en los márgenes de la carretera no drenaban correctamente el agua de lluvia» por lo que se formó la placa de hielo que provocó el accidente. Ahora, gracias al auto judicial, los responsables regionales deben indemnizar a la joven demandante con 20.200 euros -más intereses-. Su accidente no fue el primero, pero la sentencia fijará un precedente en la zona. Según su abogada, los perjudicados que sufrieron las molestias de la vía en mal estado anteriormente no se atrevieron a denunciar y por eso no se llega a solucionar el problema. Y es que la carretera de la Pola (AS-331) es una popular vía de comunicación para muchos conductores. Los vecinos de la zona, que han visto más de un accidente frente a sus casas, ya se habían quejado de la falta de mantenimiento que sufría la carretera, un hecho que el juez ha tenido en cuenta a la hora de dictar la condena al Gobierno regional. En la vista oral del juicio, que se celebró en Oviedo, estuvieron también presentes los vecinos del lugar que aportaron su visión de los hechos al magistrado.

Pero la sentencia va más allá cuando asegura que no solo no se había cuidado bien la zona sino que tampoco «se había colocado señalización alguna anunciando el peligro del hielo en la calzada».

Como consecuencia del derrape que sufrió con su moto, la joven que padeció el accidente tuvo que permanecer hospitalizada durante 11 días y tiene problemas en el tobillo además del «ligero» perjuicio estético que la lesión le ha causado.

De esta manera la Sala 1 de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Asturias ha sentado un precedente en las quejas vecinales que ahora deberán ser escuchadas con la condena impuesta al gobierno regional. La Consejería de Medio Ambiente será la encargada de asumir el coste de la indemnización, ya que en el año 2003, en el que tuvo lugar el accidente, era también encargada del área de infraesctructuras.

En su sentencia, el magistrado García Robles, entiende que «está acreditada la existencia de una relación de causalidad directa, efectiva y necesaria entre el siniestro de autos y la omisión por parte de la Administración de dar cumplimiento a la obligación que le incumbía de evitar este tipo de accidentes conservando la vía» por lo que, al final y tras la resolución judicial, los vecinos tenían razón y la joven acertó a la hora de interponer la denuncia contra los responsables regionales.