Román GARCÍA

Los vecinos solicitaron un decreto municipal en el que los responsables políticos comprometieran la excepcionalidad de celebrar la «Semana negra» en Poniente. No lo han conseguido, por lo que en la asamblea vecinal celebrada en la tarde de ayer decidieron ir a juicio con el apoyo de 42 votos. Otros 12 querían judicializar el tema en el futuro y ningún vecino quiso seguir las negociaciones. Demandarán la decisión del Ayuntamiento de establecer el recinto ferial en Poniente a pesar de que son conscientes, como dejó muy claro el presidente de la Asociación «Pando», Manuel Ángel García Baragaño, de que «es muy difícil que este año nos la quiten de aquí». No hay decreto y, por tanto, no se fían de «los compromisos políticos» de los responsables municipales.

En el encuentro vecinal Baragaño expuso los resultados de las negociaciones llevadas a cabo durante los últimos días con el Ayuntamiento. Aseguró que «lo que nos dijo el abogado que era fundamental, tener un decreto de Alcaldía en el que se comprometan a celebrar el ferial sólo un año aquí, no nos lo pueden dar, nos ofrecen las actas de las reuniones que hemos mantenido firmadas y que eso sirva como compromiso político». Baragaño contó a los vecinos las impresiones que se había llevado después de reunirse también con la organización de la «Semana negra»: «Paco Ignacio Taibo nos animó a meternos en un juicio porque de todas maneras va a tardar y yo podré hacer la feria en Poniente durante al menos tres o cuatro años más». El organizador del evento veraniego llegó incluso a ofrecerse para ir a la asamblea.

Respecto al cambio del mapa del ferial que este verano ocupará un 18 por ciento del arenal de la playa, los responsables municipales aseguraron a los vecinos que era imposible menguar aún más las atracciones, aunque cabría la posibilidad de vallar los edificios. Baragaño aseguró que «nos dijeron que los coches de choque eran imprescindibles y no se podían quitar». Además, algunos vecinos hicieron ver la posibilidad de que «el cierre de Naval les haga pensar que tienen más sitio aquí y no se mueve el ferial», por eso ahora van a juicio. Para el proceso recaudarán entre 4.000 y 12.000 euros entre los vecinos.