J. L. A.

La compañía pública Hunosa ha entregado el calendario para empezar a incorporar a sus pozos a los trabajadores excedentes de Mina La Camocha, empresa que cerró oficialmente el pasado 31 de diciembre en cumplimiento de los acuerdos pactados para el ajuste de la minería española. Las previsiones de la hullera estatal consisten en hacer este mes el preceptivo reconocimiento médico a los primeros 35 trabajadores, que irán a destino laboral a partir de junio.

Ese calendario establece que Hunosa incorporará a su plantilla, antes de que finalice el año, a un total de 103 mineros de La Camocha, según el plan de cese y abandono que se sigue tras la clausura de la histórica explotación carbonera gijonesa. En junio se llamará para el examen médico a otros 35 trabajadores, mientras que los 33 restantes, hasta completar el número de 103 mineros con el que se completa esta primera fase, pararán la revisión en julio y agosto, meses en los que se darán las órdenes de destino en función de las necesidades en los pozos del Caudal y del Nalón.

Los acuerdos para el cierre de La Camocha garantizan a los mineros el cobro de sus salarios, aunque, según fuentes laborales consultadas ayer, estos trabajadores siguen sin percibir las cantidades que se les adeudan desde el pasado 1 de enero. La empresa gijonesa está en situación de insolvencia tras declararse en quiebra, aunque el pasado 8 de abril, el entonces secretario de Estado de Energía, Ignasi Nieto, se comprometió con representantes de los sindicatos mayoritarios a abonar los sueldos de 2008, a acelerar el paso de la plantilla a Hunosa y a buscar soluciones con los administradores concursales de la quiebra de la mencionada mina. Habrá que ver ahora, tras los cambios producidos en el Ministerio de Industria, cómo se concretan esos compromisos. En La Camocha aún permanecerán otros cuarenta y un mineros en labores de cierre del pozo.