Director de la Escuela Politécnica Superior de Ingeniería

C. JIMÉNEZ

Hilario López García es desde el pasado mes de noviembre director de la Escuela Politécnica Superior del campus de Gijón, uno de los centros favorables a la unificación de las tres escuelas de Ingeniería, aprovechando la adaptación al Espacio Europeo de la Educación Superior (EEES). En este marco, «no tiene sentido la coexistencia de escuelas técnicas, escuelas universitarias y escuelas superiores», señala.

-¿Qué opina de la decisión del Rectorado de agrupar todos los estudios del campus de Gijón en un centro único?

-Nuestra postura es favorable. La estructura de centro único es la mejor para abordar el proceso Bolonia. Las sinergias entre las ingenierías van a ser importantes y permitirán potenciar cualquier acción en común. Desde la campaña electoral en noviembre fue la propuesta que defendimos y todos estos meses hemos ido pulsando la opinión.

-¿Ha habido consulta del Rectorado?

-Desde la toma de posesión en el cargo de unos y otros hemos tenido reuniones constantes con el equipo rectoral y en las celebradas a lo largo de este año se tocó el tema del centro único en el campus de Gijón. De cara a Bolonia no tiene sentido la coexistencia de escuelas técnicas, escuelas universitarias y escuelas superiores. Queremos fomentar las relaciones entre las diferentes titulaciones.

-¿Cuál es su principal temor en este proceso?

-Qué duda cabe que ponerlo en marcha no será un proceso sencillo. Sabemos que existirán complicaciones pero hay muchas ventajas. En las votaciones de los nuevos planes de estudios ya hemos demostrado la unión.

-¿Cómo afectaría esa hipotética fusión al alumnado?

-Una gran escuela permitirá que esté todo mucho más ordenado: la docencia, las aulas y el profesorado. Nuestro primer objetivo como Universidad es la docencia y ahí seguiremos trabajando. Eso sí, tenemos muy claro que los alumnos de los planes antiguos tendrán que estar igual de atendidos que los de los nuevos planes, con una persona en exclusiva dedicada a esos estudiantes.

-El Rectorado y el Principado insisten en que en esta decisión permitirá optimizar recursos. ¿Está de acuerdo?

-Ventajas hay muchas en el centro único y los puntos en común entre las tres titulaciones (Informática, Telecomunicación e Industriales) también son muchos.

-¿Se ven preparados para el cambio?

-No será sencillo pero con la ayuda que nos presta el Rectorado, los profesores y los alumnos creo que se llevará adelante. No será un proceso simple pero hay voluntad y estamos muy ilusionados en esta tarea.

-¿Cabría ahora recuperar aquella idea de una universidad politécnica para Gijón?

-Muy pocas personas pierden un minuto en ello. Estamos muy cómodos en la Universidad de Oviedo, que es la Universidad de todos los asturianos. Queremos trabajar en esa dirección y no perder el tiempo en otras cuestiones que no interesan. Buscamos agilidad en el funcionamiento y la Universidad de Oviedo nos lo está proporcionando. El centro único, desde el punto de vista de la ingeniería, nos permite funcionar de forma más coordinada y generando más sinergias entre nosotros.

-¿Se están planificando los nuevos planes de estudios con el objetivo del centro único?

-Todos los nuevos alumnos de Industriales que se incorporen en el curso 2010-11 (tanto de los grados de Industriales como de Telecomunicación e Informática) deberían entrar ya en la estructura de ese centro único. Además contamos con tener a una persona dedicada en exclusiva a estas cuestiones. Cuando ha venido gente a esta escuela para hablar de Bolonia siempre les ha sorprendido que una misma persona asumiera las tareas de jefe de estudios y la gestión de calidad del centro.