Eloy MÉNDEZ

Los vecinos de Somió están «cansados» de pedir que se mejoren los accesos desde vías secundarias a las avenidas del Jardín Botánico y de la Pecuaria, dos de las arterias más importantes que atraviesan la parroquia. Una solicitud que ha tomado más fuerza tras el accidente ocurrido el pasado jueves en un entronque del camino de los Tulipanes, que dejó gravemente herida a una mujer que empotró su vehículo contra un autobús de la Empresa Municipal de Transportes (Emtusa). «Creemos que es francamente mejorable la señalización de estas intersecciones, por las que pasan cientos de coches todos los días, ya que se trata de una zona muy poblada», asegura la presidenta de la Asociación de Vecinos «San Julián», Soledad Lafuente.

La petición de mejora en las salidas a las avenidas de la Pecuaria y del Jardín Botánico viene de largo y es considerada «una prioridad» para los miembros del colectivo vecinal de Somió. «Desde que se inauguró la avenida de la Pecuaria hemos venido avisando de que los accesos de los caminos de algunas urbanizaciones son mejorables. Estamos hablando de calles que antes morían sin más, pero que ahora dan a una avenida con mucho tráfico», aseguró Lafuente nada más estrenarse la vía que comunica Albert Einstein con la Laboral.

La situación en la avenida del Jardín Botánico es similar. De hecho, los vecinos han enviado ya numerosos escritos a los responsables municipales de la ordenación del tráfico, sin obtener ninguna respuesta a cambio. «El accidente que se produjo el jueves era previsible. Hemos presentado ya cuatro demandas para corregir esta situación, pero todas han caído en saco roto», señala la presidenta vecinal, que además pide incrementar los controles de velocidad en la zona. «Una de nuestras reivindicaciones más repetidas es que se cumpla la señalización en los principales puntos de circulación y, para ello, es necesario una mayor vigilancia y, quizás, instalar nuevos radares», insiste Lafuente.

Los problemas derivados del denso tráfico que soportan los accesos al centro de la ciudad desde la zona Este preocupan también a otras asociaciones vecinales. Desde La Guía se ha solicitado también una y otra vez la adopción de medidas que palíen el intenso ir y venir de coches por el centro del barrio. Por eso, el presidente, Paulino Tuñón, exigió hace año y medio que se semipeatonalizara el tramo de la avenida del Jardín Botánico comprendido entre el cruce con Albert Einstein y la glorieta del Piles. Aunque no consiguió que se tuviera en cuenta su propuesta, sí arrancó del Ayuntamiento la instalación de semáforos «disuasorios» para desviar a los conductores por otras rutas. «Un fracaso», según ha dicho el propio Tuñón en varias ocasiones.

La ordenación del tráfico también motivó duras críticas por parte de la Asociación «La Pontica» de Cabueñes. Su presidenta, Ana María García, criticó hace unos meses la construcción de la avenida de la Pecuaria al poner en duda su utilidad para mejorar la circulación, y lamentó que su apertura no llevara aparejada una reordenación del transporte público.