R. VALLE
Los responsables del área cultural del Ayuntamiento de Gijón y el equipo de arquitectos que triunfaron en el concurso de ideas para el diseño del futuro Museo de Gijón en Cimavilla están «viendo detalles», en palabras del edil de Cultura, Justo Vilabrille, con vistas a concretar en las próximas semanas el proceso de adjudicación de la redacción definitiva del proyecto museístico. «Lo adjudicaremos antes de que acabe el año», explicaba ayer el edil socialista. Septiembre era, al principio, el mes designado por el Ayuntamiento para realizar la tramitación de esa fase del proceso, que tiene un coste de 820.000 euros y un plazo temporal de ejecución de seis meses.
Una vez cumplimentado este proceso será el momento de empezar a pensar en un inicio de obra que está muy pendiente de las reducciones presupuestarias por la crisis. No hay que olvidar que el Museo de Gijón tiene un coste de partida de 17 millones de euros, que obliga a pensar en la colaboración de todas las administraciones.
Uno de los detalles que están matizando los técnicos municipales y los arquitectos que ganaron el concurso, encabezados por Román Villasana, es el diseño definitivo del acceso directo al cerro de Santa Catalina previsto desde la plaza peatonal que unirá las dos edificaciones del complejo museístico: la rehabilitada Fábrica de Tabacos y un inmueble de nueva construcción que albergará las piezas que ahora están en el Museo Nicanor Piñole. Justo Vilabrille explicaba ayer que se están barajando varias opciones que pasan desde el uso de un plano inclinado a la construcción de una escalera. Además, y en esa misma línea de concretar detalles del proyecto inicial, se están trabajando las distintas fórmulas de circulación de los visitantes entre todas las dependencias del Museo de Gijón.
Más allá del tratamiento arquitectónico de los dos inmuebles del museo, la realización de este proyecto supone también un cambio sustancial en Cimavilla, al incluir la reforma de la plaza de Arturo Arias y la construcción de un aparcamiento subterráneo bajo el futuro vial que conecte las calles Eladio Verde y Sebastián Miranda.
